Hoy, en el programa de Javier Sardá, Crónicas Marcianas a la 1 de la mañana se debatía sobre qué es la Telebasura. Los sesudos tertulianos entre los que se encontraban: Boris, Karmele, Hornillos, Lequio, Valverde, Campeón, La Chirri, el Chulé, el Cabra, y el catedrático Ramoncín.
El gran Ramoncín daba una definición de Telebasura que era de Aurora Boreal y decía el Genio del pollo frito que: Telebasura es lo que hizo Urdaci con su anuncio sobre la querella de CC OO. La verdad es que no sabía muy bien de qué hablaba, pero quedaba intelectual. Sardá defendía la Telebasura atacando a la Iglesia y arreando palos a diestro y siniestro. Acabó diciendo que pegar está mal, que insultar está mal y que follar está bien. Hasta aquí todos de acuerdo. Lo incomprensible es que en la académica tertulia las conclusiones hayan sido que los propios inventores de la Telebasura se atrevan a analizar qué pasa con la Telebasura.
Pudos ver a Alejandro Echevarría, presidente de Telecinco en la Asociación de la Prensa de Madrid, avergonzado, reconociendo ante un pequeño grupo de periodistas que le sonrojaban muchos de los programas de Telecinco.
Pero, en Telecinco continúa el silencio a cal y canto y nadie se atreve a poner el cascabel al gato de la Telebasura.