Lo dejó bien claro Elena Salgado: el Gobierno no va a financiar el déficit sanitario. Según la ministra, una parte de la deuda acumulada las comunidades autónomas en los últos dos años se debe a una política de gasto equivocada los Ejecutivos regionales.
Salgado no especificó la ineficiencia del gasto sanitario autonómico, pero sí dio ejemplos de algunas actuaciones ‘discrecionales’, como la fuerte subida del salario al personal médico decidida algunas CC AA, medidas que, según la ministra, el Estado no tiene qué pagar.
También se mostró favorable a seguir profundizando la vía de los puestos, estatales o autonómicos, antes que aplicar cualquier método de ‘copago’ que plique que los más necesitados, sobre todo jubilados, acaben sufragando parte del gasto con sus escasos recursos. La sanidad, según la ministra, debe entenderse como una prolongación de servicios que ofrecen las administraciones y si el resto se financia con puestos es entendible que lo hagan también los gastos sanitarios.