Corren buenos tiempos para las empresas de información escrita. La recuperación del sector publicitario y el incremento en el número de lectores han sido los bastiones sobre los que se ha apoyado el creciento del sector, que ha obtenido unos beneficios netos en conjunto de 208,08 millones de Euros.
Corren buenos tiempos para las empresas de información escrita. La recuperación del sector publicitario y el incremento en el número de lectores han sido los bastiones sobre los que se ha apoyado el creciento del sector, que ha obtenido unos beneficios netos en conjunto de 208,08 millones de Euros.
Según los datos facilitados la AIMC, la difusión de los ejemplares de prensa escrita ha crecido de media un 9%. Destaca la subida de la prensa de información general, aunque aún queda lejos del líder del sector, la prensa detiva especializada, que ha consolidado este liderazgo con un incremento del 12,8% desde 1994.
Resulta paradigmático que en un país en el que el 21 ciento de los españoles de quince años no alcanza el nivel básico de lectura y comprensión de textos escritos la información mayormente demandada sea la detiva, con su particular diseño basado en la agen y la splificación del vocabulario. Lo preocupante es la tendencia alcista de estas cifras, que nos sitúan en la retaguardia del furgón muy lejos de los países norteños, sólo delante del resto de países de la cuenca mediterránea (Italia y Grecia).
Por su parte, la prensa económica ha sabido superar las crisis de los mercados financieros desde comienzos del milenio y ha experentado el mayor creciento del sector, con un 17,9% respecto a las cifras barajadas una década atrás.
Otra de las preocupaciones del sector es lograr que el colectivo femenino lea – y compre – más periódicos, para lo que se propone actualizar los contenidos de los diarios ya existentes hacia enfoques más femeninos, o la creación de publicaciones nuevas especializadas dirigidas hacia la mujer.
A pesar de todo, los beneficios han crecido en casi un 50%, sin contar el insistente requeriento parte de los empresarios del sector hacia la Administración para reducir el IVA del 4% actual al 2 ó 1% grabado en el resto del continente europeo.
