Por fin se ha cerrado Telesierra. Ya había advertido la Comunidad de Madrid que no iba a permitir que siguieran emitiendo determinados canales locales que no cumplieran la legislación vigente, y esta mañana se ha materializado la advertencia. La Guardia Civil ha entrado en las instalaciones de Telesierra, propiedad de la familia Del Campo (el matronio formado Rodrigo del Campo y Rosario Cobo), en la localidad madrileña de Tres Cantos.
Por fin se ha cerrado Telesierra. Ya había advertido la Comunidad de Madrid que no iba a permitir que siguieran emitiendo determinados canales locales que no cumplieran la legislación vigente, y esta mañana se ha materializado la advertencia. La Guardia Civil ha entrado en las instalaciones de Telesierra, propiedad de la familia Del Campo (el matronio formado Rodrigo del Campo y Rosario Cobo), en la localidad madrileña de Tres Cantos.
Hasta ahora este canal de televisión venía facturando millones de euros al año gracias a concursos amañados, numerosas veces denunciados a las organizaciones de consumidores ser un to claríso. Aunque esta actuación de la Comunidad de Madrid no sólo beneficia a ésta, ya que las emisiones también se podían seguir en toda España a través de una red de televisiones locales que habían comprado la programación a los Del Campo.
El to era muy sencillo: se hace una pregunta evidente y se anuncian unos premios que se pueden conseguir de inmediato. El presentador advierte constantemente a los espectadores que no hay llamadas que den respuesta a esa pregunta tan sencilla… mientras que los que están llamando a las líneas 806 nunca entran en antena. Cuando se da paso a una respuesta, suelen estar grabadas en control de antemano.
Por cierto que el engaño era tan burdo que no se llegaba ni siquiera a establecer lo que se llaman falsos directos… sino que el presentador sólo pedía la respuesta, que habitualmente cuando sonaba en antena no tenía sentido. En los juzgados se han presentado algunas denuncias con facturas de teléfono que han llegado al millón de pesetas (6.000 euros). Las principales víctas eran niños y ancianos.
La gran pregunta que nos hacemos en PRNoticias es cómo la Comunidad de Madrid y la justicia ha permitido que este fraude continuara durante tanto tiempo, siendo tan evidente y tan indignante. Recordemos que para emitir una señal de televisión hay que hacer uso del espectro radioeléctrico, que es público y de todos, y llama la atención que hasta ahora no les haya tado lo más míno, cuando en otras ocasiones se ponen tan quisquillosos. De todos modos… bienvenido sea este cierre.
