Roberto Palomar, uno de los redactores jefe y columnistas más respectados del diario detivo de Recoletos no pasa un buen momento. Manuel Saucedo lo tiene incorado en su lista negra y periódicamente le ha ido quitando responsabilidades dentro de Marca. Prero fue retirada su columna diaria de últa página tras la destitución de Elías Isralel y ahora se le ha apartado de las labores de gestión de redacción. Su gran pecado ha sido criticar al Real Madrid. en sus crónicas. Florentino nuevamente ha hablado y Castellanos y Saucedo han escuchado.
Roberto Palomar, uno de los redactores y columnistas más respectados del diario detivo de Recoletos no pasa un buen momento. Manuel Saucedo lo tiene incorado en su lista negra y periódicamente le ha ido quitando responsabilidades en Marca. Prero fue retirada su columna diaria de contratada tras la destitución de Elías Isralel y ahora se le ha apartado de las labores de gestión de redacción. Su gran pecado ha sido criticar al Real Madrid en sus crónicas. Florentino nuevamente ha hablado y Saucedo y Castellanos han escuchado.
Según ha podido saber PRNoticias, Palomar ha sido uno de las plumas más críticas del periodismo detivo con la gestión de Florentino Pérez al mando del Real Madrid. Su acidez e independencia ya provocaron hace dos temadas que dejara de ser el cronista del Real Madrid, como después le sucedió a Enrique Marín, hoy redactor jefe de As.
Pero Israel siguió apostando Palomar y le convirtió en el columnista de referencia en la últa página del periódico los dos últos años. No obstante, cuando Palomar opinaba sobre el Real Madrid en sus seguidas columnas, Florentino Pérez descolgaba el teléfono para llamar a Jae Castellanos, presidente de Recoletos y amigo personal del presidente del Real Madrid para darle un toque de atención.
Castellanos y Pérez son socios en una compañía de seguros y el presidente de Recoletos ha ofrecido a Florentino entrar como inversor en la OPA para comprar las acciones de Pearson. Estas conversaciones, en las que Pérez expresaba su descontento y enfado a Castellanos las opiniones de algún columnista de Marca. Es ello que una de las órdenes de Saucedo al asumir la dirección de Marca era forzar la salida de todos los periodistas críticos con el Real Madrid.
Y así ha sido, unos fueron despedidos y otros apartados como Palomar, que ha pasado a un ostracismo absoluto. Entre los redactores de Marca existe la sensación que Saucedo quiere apartar a Palomar como ya hizo en su anterior mandato con dos redactores históricos del diario como José Manuel García y Alberto Polo, dos de los 22 despedidos también Saucedo en el año 2001, en su últo acto como director en su anterior etapa antes de ser nombrado director general el área detiva de Recoletos.










