Ayer decíamos “Aquí yace la verdad” (como consecuencia del cierre de la “Comisión del 11M”) y hoy decos “Aquí yace la reconciliación” (como consecuencia de los dos acontecientos del día: el homenaje a Carrillo y la retirada de la estatua de Franco). Alguien se ha propuesto, está claro, abrir los armarios y dar vida, otra vez, a las dos Españas. ¡Adiós espíritu del 78! Porque hoy, de nuevo, media España está festejando a los suyos y la otra media está llorando a los suyos. Los vencidos de ayer cantan y bailan con catañuelas y los vendedores de entonces se lamen sus heridas en silencio. La “bestia negra” de aquellos cuarenta años ha vencido a la “bestia negra” de los últos veintisiete. Quien siembra vientos recogerá tempestades.
Y lo dijo muy claro el gran Indalecio Prieto tras su fuga cuando lo de Asturias en el 34:
“Y lo peor no es lo que ha pasado en Asturias y lo que está pasando; lo peor es el torrente de odio que se está represando en España. Mi alma está pregnada de una extraña mezcla de tristeza y de ira. VEO HORIZONTES MUY NEGROS EN EL PORVENIR”.
Pero no se preocupen, que aquí no pasa nada. Pasará.
Equipo Séneca










