Mientras todo el sector está a la espera de las concesiones de televisión analógica, Izquierda Unida ha presentado una enmienda a la ley de TDT que lita al 30% la concentración de un sólo consorcio en un ámbito de cobertura. La ley que ha divido al sector radiofónico propone un 50% de límite. Puestos en contacto con las cadenas hemos encontrado una valoración positiva a la enmienda, aunque insuficiente a juicio de muchos. El más perjudicado sería la Cadena Ser, pues debería comenzar a vender algunas emisoras en regiones.
Mientras todo el sector está a la espera de las concesiones de televisión analógica, Izquierda Unida ha presentado una enmienda a la ley de TDT que lita al 30% la concentración de un sólo consorcio en un ámbito de cobertura. La ley que ha divido al sector radiofónico propone un 50% de límite. Puestos en contacto con las cadenas hemos encontrado una valoración positiva a la enmienda, aunque insuficiente a juicio de muchos. El más perjudicado sería la Cadena Ser, pues debería comenzar a vender algunas emisoras en regiones.
Según IU esta propuesta tiene objetivo “favorecer la pluralidad y evitar la concentración monopolística y favorecer la concurrencia”. Entre sus 13 enmiendas, referidas a los tres ámbitos de la ley, televisión privada, televisión local y radio. Respecto a la radio, IU propone además reducir el límite máxo de cinco concesiones en ese mismo ámbito propuesto el Ejecutivo a las tres que fija la ley de 1987, una en Onda Media y dos en Frecuencia Modulada.
El ejecutivo sorprendió hace dos meses al sector radiofónico con la propuesta que a juicio de la Cadena COPE y de Onda Cero, favorecía directamente a la Cadena Ser para que legalizara sus pequeños monopolios regionales. El tema viene de largo, desde el famoso antenicidio, cuando Prisa compró las señales en todo el país de Antena 3 Radio y posteriormente las cerró o las incoró a su cadena nacional.
Puestos en contacto con fuentes del sector, pudos saber que los principales perjudicados están de acuerdo con estas medidas, aunque las consideran insuficientes para evitar que Prisa consiga el monopolio de todas las emisoras locales. Por su lado, en la Ser no ven este intento como algo muy favorable, ya que de aprobarse esta enmienda (y es muy probable que así sea, si es que el PP la apoya) tengan que comenzar a deshacerse de muchas de sus pequeñas emisoras regionales, que podrían haber sido legalizadas con el proyecto original.
Dependiendo del trámite que tenga la enmienda en el Congreso, las cadenas no descartan reactivar su maquinaria de comunicaciones para presionar su rechazo o su aprobación, dependiendo de cuál sea su rumbo, y qué apoyos logre reunir en Las Cortes.
Seguiremos informando…
