Desde el pasado dos de abril, tras la muerte de Juan Pablo II, las televisiones han modificado radicalmente sus parrillas de programas colmando los espacios con informativos y documentales sobre la vida del Papa. El aconteciento ha hecho que subiera la media de minutos vistos con respecto al sábado y domingo anteriores en un 17,2%. Sin embargo, ninguno de los especiales de las cadenas ha sido el más visto de sus respectivas franjas horarias, según datos de Optedia en base a cifras de Sofres.
Desde el pasado dos de abril, tras la muerte de Juan Pablo II, las televisiones han modificado radicalmente sus parrillas de programas colmando los espacios con informativos y documentales sobre la vida del Papa. El aconteciento ha hecho que subiera la media de minutos vistos con respecto al sábado y domingo anteriores en un 17,2%. Sin embargo, ninguno de los especiales de las cadenas ha sido el más visto de sus respectivas franjas horarias, según datos de Optedia en base a cifras de Sofres.
La muerte del Papa y posterior velatorio ha hecho que subiera la media de minutos vistos de este fin de semana con respecto al sábado y domingo anteriores en un 17,2%. Se ha pasado de 209 minutos diarios a 145 minutos. Sin embargo, ninguno de los especiales que han llenado la parrilla ha sido el espacio más visto.
De esta manera, Telecinco, que nuevamente, al igual que en Semana Santa ha apostado un programación menos religiosa que el resto de las cadenas, ha triunfado con dos de sus programas: la serie Aída emitida el domingo la noche que ha conseguido 5.800.000 espectadores, frente a la Fórmula Uno del domingo al mediodía que congregó a 5.029.000 personas, con una cuota de pantalla de 45,7%.
Los datos procesados Optedia en base a las cifras que entrega habitualmente Sofres, también indican que dentro de los informativos, el más visto fue el del mediodía del sábado de La Prera. Tiene más tirón televisivo la expectación que los hechos en sí.









