Manifestación en la entrada del edificio corativo del Grupo Recoletos durante esta mañana.
Los 67 trabajadores de Expansión TV, de los cuales 61 están incluidos en el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) supuestamente presentado Recoletos, se reunían hoy a las puertas de la empresa para reclamar su derecho a trabajar. La empresa les ha dado unos días de vacaciones pagadas y no les deja entrar en su lugar de trabajo. No sólo se enfrentan a las ventanillas del INEM, también tendrán que luchar con sus gestorías para convencerles de que el engaño de compra de acciones a 12 euros (salida a Bolsa de Recoletos) y su recompra a 7 euros (Operación Retos Cartera) han sido un buen negocio. Los ános se están caldeando y de nada sirve que Castellanos y Martínez Vázquez se escondan.
Los trabajadores han presentado 61 demandas. Además, se quejan de que sus compañeros del Grupo están viendo en sus cas lo que les va a pasar a todos pero están guardando un ordenado silencio.
Eran muchos los gritos que los allí convocados proferían: Retos Cartera es una estafa; Recoletos 12 euros nos han engañado; Dónde están los vales de guardería; Por qué no podemos entrar; Hoy nosotros, tú mañana; El perio Castellanos se desmorona; Esto es una tele y no somos peleles; Esto no es justo, queremos trabajar. Uno de los trabajadores nos comentaba que tiene cuatro hijos, se preguntaba: Dónde está la fe y el comtamiento católico del que hacen gala, entre otros el asturiano Martínez Váquez, y que ante su desesperada situación (en la que no se encuentra él sólo) les ofrecen la posibilidad de trabajar como maquetadores en Marca. De las ofertas prometidas en Qué!, nada de nada.
Los ános están muy calientes en las distintas redacciones. Puestos en contacto con redactores de Marca nos cuentan que están preparando una muy gorda. Por su parte los redactores de Expansión están a la espera de ver qué va a pasar con ellos al igual que los de la Económica. Mañana se celebra junta general de accionistas y hasta allí van a llevar sus quejas los 61 despedidos. Otro de los allí congregados nos contaba como había dejado su anterior trabajo y ahora se ve en la calle, sin una explicación y con sus expectativas laborales y personales defraudadas.
La empresa amenaza a los trabajadores con pagar sólo 20 días año trabajado, con lo cual muchas de las liquidaciones, no llegaría ni a seiscientos euros. Con este palo les colocan la zanahoria de la posibilidad de negociar hasta los 45 días año trabajado ofrecidos en su momento.
Mañana es uno de los días clave en este cierre anunciado, el problema y lo difícil es lo que está llegar.
Seguiremos informando…
