David Radler es sospechoso de participar en un plan fraudulento el que se desviaron más de 32 millones de dólares de la compañía Hollinger. La acusación incluye al ex abogado de esa compañía Mark Kipnis, y a The Ravelston Coration, un grupo empresarial con sede en Toronto que tenía una participación mayoritaria en Hollinger y que se halla en proceso de bancarrota bajo las leyes canadienses.
David Radler es sospechoso de participar en un plan fraudulento el que se desviaron más de 32 millones de dólares de la compañía Hollinger. La acusación incluye al ex abogado de esa compañía Mark Kipnis, y a The Ravelston Coration, un grupo empresarial con sede en Toronto que tenía una participación mayoritaria en Hollinger y que se halla en proceso de bancarrota bajo las leyes canadienses.
Los plicados realizaron operaciones fraudulentas con las que se beneficiaron personalmente, y perjudicaron a accionistas en los EE.UU. y Canadá, además de evadir puestos, según la acusación dada a conocer hoy Patrick Fitzgerald, fiscal del distrito norte del estado de Illinois.
Radler está cooperando con las autoridades en la investigación y prevé declararse culpable en una fecha posterior, según la Fiscalía. Fitzgerald señaló que los inversores tienen derecho a esperar a que los ejecutivos y consejeros de las compañías “gestionen y no roben el dinero de los accionistas”.
AGENCIAS
