Me ESCONDO tras las barbas de mi DIRCOM

Parece que hay que pedir audiencia para que un periodista escuche la voz de los directores de comunicación de los distintos ayuntamientos de la Comunidad.

Parece que hay que pedir audiencia para que un periodista escuche la voz de los directores de comunicación de los distintos ayuntamientos de la Comunidad de Madrid. Y es que sino eres Fernando Baeta (M2) o Lluis Bassets (El País), conseguir que se ponga el dircom de turno al teléfono es casi un posible. ¿Cuál es el mundo oculto de estos gabinetes de prensa? ¿Son los alcaldes los que han contagiado de opacidad a sus comunicadores?

En esta entramada red de intereses creados cabe preguntarse si los gabinetes de comunicación de las casas consistoriales están al servicio de los periodistas que buscan información del pueblo en cuestión o de los “trapicheos” ocultos de sus alcaldes con complejo de señores feudales de su municipio. En este sentido, el político que se supone más cercano a los ciudadanos aparece envuelto en una nebulosa que no les conviene despejar.

Quizá este sea el motivo de que la relación, que debería ser fluida, con los periodistas se convierta en una gymkhana de teléfonos, extensiones, contestadores y evasivas parte de los que se encuentran al otro lado del hilo.

PRMadrid ha realizado un sondeo entre los numerosos ayuntamientos de la Comunidad y menos mal que las informaciones que buscábamos no eran de vida o muerte, que lo único que hemos conseguido es perder el tiempo. Ni un director de los muchos gabinetes de prensa a los que hemos llamado se han puesto al teléfono y las personas con las que hemos conseguido hablar son sples recepcionistas de información que en pocos casos entienden de que “va la película”.

Cabe preguntarse si son los “todopoderosos” alcaldes los que enseñan a los periodistas de estos departamentos a hacer su trabajo, que han demostrado que, en cuanto a gestión con los medios de comunicación, saben lo mismo que un horticultor de ingeniería aeronáutica.

En estos casos se produce un choque de intereses, los regidores locales, con tantes complejos de grandeza, esperan ser tada de las secciones de Madrid de los principales diarios nacionales, lo que desprecian al resto de los medios, sin darse cuenta que son precisamente estos los únicos interesados su trabajo y no las grandes cabeceras.

Suspenso, tanto, para la soberbia municipal y suspenso para sus comunicadores. Sin embargo, todavía queda mucho curso delante y no está todo perdido… como se dice en el colegio, todavía queda la repesca y en PRMadrid creemos que la actitud de los gabinetes no es una línea insalvable sino una pérdida de orientación. Así que queremos hacer un llamamiento a estas ovejas descarriadas de la profesión para que recuperen la esencia de lo que tiene que ser su trabajo.

Seguiremos informando…