Guillermo Fariñas ha dicho a Reteros sin Fronteras: “Quiero que todos los ciudadanos cubanos tengan derecho a conectarse a Intet, pero también que la prensa independiente pueda informar sobre las actuaciones del gobierno. Si tengo que ser un mártir del acceso a la información, lo seré”, ha añadido.
Hasta el 23 de enero de 2006, los periodistas de la agencia Cubanacán Press conseguían enviar sus despachos a través de un centro público de acceso a Intet de Santa Clara, en el centro del país. A partir de entonces se les pide hacerlo con el fin de restringir las denuncias de las violaciones de los derechos humanos en Cuba.
Las autoridades utilizan el embargo norteamericano como un pretexto para justificar una política liberticida, en materia de Intet, pero el objetivo real es restringir el acceso a la información parte de la ciudadanía y es un privilegio reservado a muy pocos, que además necesita de una autorización expresa del Partido único.