Negocios como el arte hay que ponerlos en manos y ojos expertos. La vícta de la estafa ha sido Lorenzo Sanz, el ex presidente del Real Madrid, ahora capo de un equipo de fútbol italiano. En algún punto de su gráfica de creciento, las grandes fortunas tienden a adornar su patronio inmobiliario con obras de arte. Es una forma de legitación. También de exhibición. La belleza y el dinero no se esconden. Sanz se puso a buscar cuadros. Un día recibió la llamada de un grupo que le ofrecía una colección española a precios muy convenientes. Los vio y los compró, sin que nadie más que él contemplara vírgenes y bodegones. El prero, un cuadro atribuido los vendedores al Veronés; el segundo una tela del pintor español Arellano. Por el prero pagó millón y medio de euros, es decir 250 millones de pesetas. Por el segundo 300.000 € que equivalen como saben a 50 millones de las desaparecidas pesetas. Una vez cerrada la operación, Sanz llamó a Lloyd’s en París para que le aseguraran la colección un valor total de varias decenas de millones de euros. La aseguradora envió a su casa a un perito, este sí experto en arte, no en el arte de la estafa, sino en el de los pintores que según las fichas habían firmado los lienzos.
El perito vió los cuadros y al decir de los testigos se llevó las manos a la cabeza. El Veronés no era tal, sino una tela de su hermano Carlo, más conocido como Carletto. El lienzo, le dijo el experto, había salido a venta en una reciente subasta, un valor inicial de 100.000 euros. Quedó invendido, que nadie pujó esa cantidad. En la colección comprada Sanz la mayor parte de las obras eran despojos de subastas públicas, morralla de anticuarios. Otro de los cuadros, una “Virgen con niño“, atribuido a Arellano, era en realidad una pintura de alguno de los aprendices del taller de aquel pintor. El experto más bisoño en pintura española le podría haber dicho a Sanz que el original de ese cuadro que él había comprado está colgado en la catedral de Burgos. Sanz pagó la “Virgen y el niño” 50 millones de pesetas. El valor real de la pintura no supera los 4 millones.
Descubierta la estafa, tenemos que esperar el desenlace. Quienes conocen al ex presidente del Real Madrid, hombre recio y de carácter, dicen que las cosas no van a quedar así.
