El acto de entrega de la Ley de la Capitalidad a la Ciudad de Madrid se ha desarrollado según lo esperado. Efectivamente, como adelantamos en PRMadrid, Ignacio González, vicepresidente prero del Gobierno de la Comunidad, no ha podido abrir la boca, pese a ser uno de los firmantes de la Ley, sí lo ha hecho el alcalde Alberto RuizGallardón que ha vertebrado su intervención entorno a la Nación Española, y el Presidente del Gobierno, José Luís Rodríguez Zapatero, que, como ya nos tiene acostumbrados, ha pronunciado un discurso vacío de contenidos.
El acto de entrega de la Ley de la Capitalidad a la Ciudad de Madrid se ha desarrollado según lo esperado. Efectivamente, como adelantamos en PRMadrid, Ignacio González, vicepresidente prero del Gobierno de la Comunidad, no ha podido abrir la boca, pese a ser uno de los firmantes de la Ley, sí lo ha hecho el alcalde Alberto RuizGallardón que ha vertebrado su intervención entorno a la Nación Española, y el Presidente del Gobierno, José Luís Rodríguez Zapatero, que, como ya nos tiene acostumbrados, ha pronunciado un discurso vacío de contenidos.
El Palacio de la Moncloa era hoy el escenario de un gran día para la Ciudad de Madrid, que recibía su Ley de Capitalidad. Un gran día el gigantesco paso que se daba, pero con puntos tantes que se han quedado en el tintero, tal es el caso de la financiación, la que Zapatero ha pasado de puntillas y del que hoy todos los diarios se harán eco.
Antes de comentar la jugada moncloleña, vamos a detenernos en el final del acto, o mejor dicho, en el final del acto para los Periodistas que eran personas “non gratas” en el Palacio de la Cuesta de la Perdices. Parece ser que en la vivienda de Zapatero tenían prisa echar a los redactores, cámaras y fotógrafos que hasta allí se habían desplazado y, cual rebaño de ovejas, fueron arreados hacia la puerta de salida, pese a que estaban esperando al “canutazo” de González, ya que no le habían dejado hablar en el “altar”. Por cierto que, lo menos, hasta que la prensa hemos sido desalojados de Moncloa, el Presidente del Gobierno no había saludado a González, que según ha asegurado, esperaba que este “olvido” fuera enmendado en el aperitivo al que no habíamos sido invitados. Será que los Periodistas de Madrid no tenemos la grandeza institucional de Pilar Bardem, que no se pierde una, y hoy no iba a ser menos.
En cuanto al acto en sí, Zapatero ha debido acabar con una úlcera de estómago sino la tiene ya. Brillante ha sido el discurso de Gallardón en el que ha ensalzado la grandeza de España y que ha comenzado diciendo “Madrid es la gran Capital de una gran Nación: la Nación Española, una realidad jurídica, histórica y emocional muy antigua y muy necesaria de cuya buena salud depende el bienestar, la convivencia y el desarrollo en condiciones de justicia y solidaridad de 44 millones de ciudadanos”
El Alcalde se ha llenado la boca haciendo alarde de la Nación única, la solidaridad entre Comunidades… Esta Ley, según Gallardón, tiene la virtud de conectar “con el deseo general que en este momento tiene la inmensa mayoría de los españoles de reforzar la fortaleza del Estado y de los elementos que garantizan la cohesión, así como, ser la Ciudad de los símbolos en los que se expresa la Nación Española”.
Palabras que ha pronunciado en el mismo lugar en el que hace pocos días el Gobierno negociaba la desmembración de España y frente a la persona que ha promovido esa desmembración, Zapatero.
Por su parte el Presidente en su línea. Discurso vacío de contenidos y anuncio de la construcción de un centro de Cultura para la Paz, estrategia para lpiar en Madrid la agen bastante deteriorada del PSOE. Lo único que cabe destacar es el momento en el que Zapatero se ha arrancado en elogios hacia Madrid, y concretamente hacia su Metro (obra de Gallardón prero y de Aguirre después), el aeropuerto de Barajas, segundo más grande de Europa (iniciativa del Gobierno de Aznar y del ministro Álvarez Cascos aunque otros quieran colgarse esta medalla), la atracción que genera Madrid para las empresas (pese a la guerra que Castillala Mancha, del PSOE, mantiene con la Comunidad para quitárselas jugando sucio) y el espectacular creciento de la región de los últos años (con gobiernos del PP).
Con todo, un acto esperado del que poco se puede sacar salvo que, fin, Madrid tiene su Ley de Capitalidad.
Seguiremos Informando…
