‘Una casa en la que acogemos a todos’. Esto es la FaPE en palabras de su presidente, Fernando González Urbaneja. La Federación de asociaciones de la Prensa Española celebrará el próxo uno de abril en Burgos su Asamblea ordinaria, en la que la aprobación de los nuevos Estatutos será uno de los puntos clave de la convención. Si esta iniciativa prospera, las asociaciones del sector comenzarán a sumarse a la larga lista de organizaciones territoriales que componen la esencia de la federación.
Además de las 44 asociaciones territoriales, a las que se sumarán próxamente las de Cuenca y Toledo, una serie de asociaciones de prensa han expresado su voluntad de ingresar en la FaPE. La Asociación Nacional de Informadores Gráficos de Prensa y Televisión –ANIGP TV, la Asociación Nacional de Informadores de la Salud ANIS, y la Asociación de la Prensa Profesional –APP son, entre otras, las preras candidatas.
El orden del día de la Asamblea se compone de la mencionada aprobación de los nuevos Estatutos, así como la aprobación de los presupuestos y gestión y, además, se realizará una declaración a favor de la libertad de expresión.
Como hemos dicho, la aprobación de los Estatutos constituye el aspecto más tante del encuentro. Para ello, se ha determinado el carácter abierto de la reunión para todas aquellas organizaciones interesadas. Actualmente, el nuevo Estatuto está perfilando el cuarto borrador, siempre sujeto a continuas modificaciones y propuestas llegadas desde las distintas organizaciones territoriales.
El objetivo es, en palabras del presidente de la FaPE, Fernando González Urbaneja, ‘que todas aquellas asociaciones sectoriales interesadas en convertirse en miembros de la FaPE puedan realizar una solicitud en condiciones’.
‘La idea de la FaPE es erigirse en una entidad al servicio de las organizaciones de los periodistas. Últamente, parece que contamos con una voz bastante alta y nuestro intereses se dirigen esta vía de ayudar a los demás’, explicó Urbaneja.
‘La FaPE no manda, no suplanta autonomías. Se trata de un organismo con una estructura de pirámide invertida, al servicio siempre de las asociaciones y no al revés’, concluyó.
