El enéso encontronazo entre el Gobierno central y el de la Comunidad Autónoma de Madrid tiene como protagonista al lince ibérico. Después de que anteayer tres investigadores hicieran público el hallazgo de excrementos de este anal muy cerca del futuro trazado de la "carretera de los pantanos" (M501), las reacciones no se han hecho esperar, incluidas las de Medio Ambiente, que reclama la ‘paralización cautelar’ de este trazado.
El enéso encontronazo entre el Gobierno central y el de la Comunidad tiene como protagonista al lince ibérico. Después de que anteayer tres investigadores hicieran público el hallazgo de excrementos de este anal muy cerca del futuro trazado de la “carretera de los pantanos” (M501), las reacciones no se han hecho esperar, incluidas las de Medio Ambiente.
Prero fue la oposición en la Asamblea, PSOE e IU, pidiendo la paralización de esta obra aprobada el Gobierno regional. Junto a ellos, varios grupos ecologistas, como Adena y Greenpeace. A mediodía, además, la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, intervino en el asunto. Narbona aseguró haber enviado una carta al Ejecutivo madrileño para pedirle la “paralización cautelar” del desdoblamiento de la vía que une Madrid con Ávila.
Pese a reconocer que la Comunidad tiene plenas competencias, lo que ella no puede “ordenar nada”, sí propuso discutir la cuestión teniendo en cuenta la Estrategia Nacional para proteger al lince. La ministra, además, recordó que el anterior Gobierno de RuizGallardón analizó medioambientalmente el desdoblamiento y el resultado fue negativo. “La presencia del lince supone un argumento más en esa línea”, afirmó.
La Comunidad piensa diametralmente distinto. El consejero de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, Mariano Zabía, descartó a este diario paralizar el desdoblamiento de la M501, insistiendo, además, en que la fauna de la zona se beneficiará de ello. “En la carretera actual siempre está el riesgo del accidente, mientras que la nueva vía establece un paso subterráneo para grandes especies cada 500 metros, dos pasos elevados, dos ecotúneles y la protección del acceso a la carretera vallando sus laterales”, aseguró.
Zabía no ocultó su “sorpresa de que la ministra haya dado cierta la presencia de un lince pese a existir muchas dudas sobre el origen de los excrementos”: “Por supuesto que no dudo ni de los investigadores ni de sus pruebas afirmó, pero ella sabe que hay precedentes de supuestos hallazgos llegados de lugares muy remotos, los pueden haber depositado allí”. El consejero, además, recuerda que el censo del Programa Lince, “dependiente del Ministerio y de diciembre de 2005″, descarta la presencia de linces en Madrid.