Por otras razones profesionales, el otro día me los pasé entero en la Hemeroteca Nacional y tuve curiosidad ver los periódicos del 1 de abril de 1939 (el Día de la Victoria). Y me tuve que reír como si estuviera en el circo. En las sesiones de cine, que eran casi todas dobles, dos películas el precio de una (2 pesetas), en medio de la proyección había que parar para hacer un “acto patriótico”. O sea, se proyectaba en pantalla una foto de Franco enorme, se tocaba la “Marcha Real” y todo el público puesto de pie y firmes, brazo en alto, se cantaba el “Cara al Sol”. Se terminaba, se daban los vivas de rigor, se apagaban las luces y seguía la película. Y eso todos los días y en todos los cines ¡Qué tiempos! ¡Qué cosas!… ¡Y qué artículos de los periodistas! ¡Quién te ha visto y quien te ve!
También me llamó la atención que en la calle Luna un restaurante hacía publicidad de su menú diario: 3 platos a elegir entre 3 ofertas de trabajo para mecanógrafas y escribientes en el Ministerio del Aire: 1.200 plazas oposición con el sueldo anual de 3.600 pesetas. ¡Y se presentaros más de 10.000!