Luís Merino comienza su escalada en 1989, cuando es nombrado subdirector de
Felicidades. Como sientes estos 40 años, ¿Cómo tu propio cumpleaños o como el cumpleaños de un hijo?
Se ha pasado el tiempo muy rápido. En el 75 empecé haciendo radio y he estado trabajando con la radio y con la música escribiendo momentos fantásticos. No los cambiaría ningún otro camino. Los 40 años (en mi caso poco mas de 30) son consecuencia de que el reloj corre más deprisa de lo que uno cree…. ¿Y celebrarlo? Está bien. Muy pocas cosas logran estar en un momento de creciento fantástico con esa edad y estar tan o más jóvenes que el prer día.
Cuéntame, en prera persona, cómo surgió la idea.
Si rebobinas rápidamente lo ocurrido durante estos años da vértigo. Empezamos con mezcladores de válvulas, cintas y cartuchos, incorábamos la música que no ponía nadie, la ‘popularizamos’, empezamos a hacer conciertos, los sacamos a la calle, llegaron a nuestras emisoras los artistas más tantes del mundo, tocaron para nuestros oyentes… Entretanto, en tecnología fuos saltando: al satélite, al digital. Cultivamos, también en eso, la vanguardia. Ya desde el prer día las canciones más potentes, las que más gustaban o podían gustar a nuestros oyentes, las fijamos en una lista de 40 títulos: entraban, subían, bajaban, salían. ¡Que dinámica! Si lo ves deprisa…
Configurar el proyecto del aniversario fue una labor ardua. Daniel Gavela y Daniel Anido estuvieron atando en la esencia y en la definición del proyecto y en el transte a la radio convencional. Hoy creo que estamos ante el proyecto más ambicioso de la radio y el entreteniento que se ha hecho en este país. Pero habrá que trabajar muy duro y contar con la ayuda de muchos amigos para conseguirlo.
Formas parte de la historia de la radio. ¿Te consideras también historia viva de la música?
Me considero alguien que ha hecho de su trabajo su ilusión o viceversa. Entré en la radio que amaba la música y seguí en la radio que vibraba con la comunicación; pero me interesa mucho más haber vibrado con todo esto y haber provocado la evolución más que figurar en un resumen de algo.
Aunque le he dedicado muchas horas, he disfrutado lo que no está escrito. Por tanto, no se si soy un adicto al trabajo o un vicioso. Y disfrutar tampoco se pasa a ninguna historia. Eso sí: de lo que me siento profundamente orgulloso es de haber contribuido a identificar y a difundir la música de muchos creadores que hoy si son historia.
¿Qué cree que han hecho los 40 Principales la música de este país?
El Pop de este país no sería lo que es, ni tendría los seguidores que tiene, si no fuese los 40. Los 40 se han metamorfoseado ante la realidad de cada momento y han enfatizado todas aquellas corrientes que podían suponer un avance. Si a esto se le llama prescripción, los 40 han sido los presciptores, difusores y promotores de la música, y han logrado que ese grupo de seguidores creciese cada día, haciendo que la música esté pegada a nuestros momentos, haciendo que la radio se constituyera en la banda sonora de nuestras vidas. Ahora, 40 años después, España tiene una música propia. Y a eso hemos contribuido fundamentalmente. Siempre dijos que a igual de calidad los nuestros tenían preferencia de paso. Y así ha salido. Y además, ayudamos sin duda a que la música estuviese a nuestro lado y ayudamos a que desde bien chavales, la gente se acostumbrase a convivir y hacerse inseparable de un elemento prescindible de la comunicación: la radio. De ambas cosas tenemos que sentirnos muy orgullosos.
¿Siguen siendo la referencia de la radiofórmula?
En exceso, si nos copiasen un poco menos, los oyentes podrían elegir entre opciones más diferenciadas y les iría mejor. Pero eso no está en nuestra mano.
¿Quién es el profesional de 40 Principales que recuerdas con más cariño?
Sin duda Joaquín Luqui. Pero no es que se haya ido. Escuché a JL y me ayudó conocer el final de los 60. Trabajé a distancia con él en los 70 y 80. Fui su jefe y su amigo en los 90. Sufrí su desorden hasta que comprendí que el arte, la pasión y la creación pueden permitirse una serie de lujos, que los demás estamos obligados a entender. E intenté comprender y copiar las claves las que conseguía tener la entrega, la transparencia y la fuerza en dosis superiores al prer día. Todo esto era que en el fondo solo amaba algo más que la música: contarles a sus oyentes de 40 que amaba las canciones y que teníamos que seguir a sus artistas. Fue siempre el número uno.
Un grupo y una canción.
No puedo. En mi MP3 hay actualmente 12.000 temas y uso habitualmente muchos cientos. Si quieres un día con un poco más de tiempo intentamos hacer mis 40 principales…. pero a lo mejor me salen 400.
¿Y el mejor programa que se ha hecho?
¿Me creerías si te digo los 40? Yo creo que no hay programa en el que hayan intervenido más realizadores, hayan participado más artistas y haya congregados tantos oyentes. Puede ser un poco sectario, pero si sumas esas variables sale.
