La directora y presentadora de Cinco Lunas en Punto Radio, Reyes Monforte comenzó su trayectoria profesional junto a Luis Del Olmo –al que venera, en el equipo de producción de Protagonistas. Tras hacerse cargo de la sustitución de Concha García Campoy y de Julia Otero, pasó a presentar y dirigir durante 8 años, sus propios programas de radio. En televisión, también ha trabajado con Jesús Hermida y Pedro Ruiz. Esta es Reyes Monforte, a la luz de las velas de la madrugada.
Viene de buena escuela, con Luis del Olmo… ¿Algo se pega?
No todo, desgraciadamente, pero algo sí. Es más, creo que vengo de la mejor escuela. Luis del Olmo, y más que nunca tras la marcha de Iñaki Gabilondo a la televisión, es ahora el Dios de
También ha hecho sustituciones nada menos que a Concha García Campoy y a Julia Otero. ¿Pesan esas voces cuando una está en antena, sentada en un sillón que no es el suyo?
Cuando alguien está en antena sustituyendo a una gran comunicadora, lo que menos se preocupa es precisamente en escuchar esa voz, que no está. En mi prera sustitución yo sólo pensaba ‘Dios mío, Reyes, no metas la pata; no digas nada que Concha no diría, ten cuidado’. Pero era una otunidad en la que quería estar perfecta y contar muchas cosas, hablar con mucha gente… No tenía la presión de gustar a nadie. Además, nunca he tenido ningún problema con las sustituciones. Es más, me hicieron ver que tenía libertad para hacer lo que quisiera que esas noches el micrófono era mío.
De lunes a vies de
Nada de nada; menos cuando me obligan. Y eso que tampoco soy de mucho dormir.
¿También trasnocha los fines de semana?
La verdad es que no tengo ningún problema con los horarios. Llevo diez años haciendo radio de noche. Pero vamos, si me tengo que acostar un sábado a las once, no tengo ningún problema. A las tres de la mañana estoy en el quinto sueño.
La noche puede ser tan solitaria como los que viven en ella. ¿Hacer radio ayuda?
Hacer radio la noche ayuda mucho. Lo que pasa es que yo tampoco soy partidaria de los problemas de llamaditas, de los míticos problemas, del ‘mi madre no me quiere’… no establezco una diferenciación entre radio de mañana, de tarde o de noche; de fin de semana o de diario… Sólo hay radio buena y radio mala. Por la noche puedes permitirte unas licencias que quizá la mañana no, pero la radio es la radio y la voz es la voz. Está claro que los oyentes no son los mismos, pero los oyentes nocturnos también tienen derecho a escuchar a ministros, a artistas, modelos, cantantes… también tienen derecho a intervenir y a dar su opinión. Nuestro programa, salvo algunas cosas, podría emitirse tranquilamente en cualquier horario. Es radio, en definitiva.
‘Hablar hablar’ lidera su franja horaria desde hace años. ¿Qué opinión le merece este producto radiofónico?
Que quien se lo inventó, acertó de pleno. Es un digno descubriento. A mí, como profesional, pienso que no me gustaría. Prefiero lo que hago. Pero bueno, chapó el trabajo de Mara y su equipo. Somos buenas amigas.
¿Cómo son sus cinco lunas? Nuevas, llenas, menguantes…
Llenísas. A veces echo en falta otras tres horas más. ¿Ves? Eso es algo que se me pegó de Luis del Olmo risas. Ya nos podrían dar las 24 horas: hay tanto que contar…
¿Y cómo se ven las estrellas desde una emisora?
Cercanas al cielo. Tengo la suerte de poder ver el cielo desde los estudios centrales de Punto Radio, lo que la noche se ve de maravilla. Pero bueno; a otras estrellas, como a Luis del Olmo, las veo también el pasillo, si te referías a eso…
¿Su futuro está en los astros, o es algo que únicamente lo decide usted?
Todo el mundo tiene proyectos en mente, o debería tenerlos. Si no, seguiría siendo una becaria. Eso sí, siempre trabajo, y van 14 años de profesión, con la ilusión del prer día.
Y ya que hablamos del Oráculo… ¿Veremos a Reyes Monforte en el Olpo de las Ondas?
No creo que sea algo descabellado bromea. Ojala. Eso sí, lo descabellado sería pensar en reyes Monforte fuera de las ondas. Pero bueno, trabajo día a día para llegar a ese Olpo, para llegar a más gente.
¿Qué virtudes tiene Reyes Monforte como comunicadora?
Suspira. Ni idea. Ahora, si quieres, mis defectos te los digo todos. Mira: principalmente, me gusta lo que hago y miro hacia adelante si hay complicaciones. Me siento una afortunada, lo que incluso los malos ratos me compensan.
