LIMA (22/05/06) El debate electoral entre el candidato aprista Alan García y el nacionalista Ollanta Humala estuvo marcado el remezón que produjeron las declaraciones del ex jefe de Inteligencia peruana, Vladiro Montesinos. Detenido numerosos casos de corrupción, acusó a Humala de haber colaborado con el ex mandatario Alberto Fujori.
Las declaraciones del ex funcionario del fujorismo, difundidas en varios canales de televisión y emisoras de radio, fueron grabadas su abogada durante uno de los juicios a los que es sometido en una base naval. En ellas aseguraba que el candidato nacionalista ayudó a Fujori para su reelección en el año 2000. Después de eso, montó una rebelión contra el ex mandatario que, en palabras de Montesinos fue una “farsa”.
De este modo, logró alterar la agenda de ambos candidatos que tenían previsto enfrentarse al debate electoral unas horas más tarde. Si bien se trató de una acusación pactante que podría aprovechar explícitamente García para confirmar su respaldo en las encuestas, declaró que no necesita “intervención ajena” para mantener esta tendencia. Por el contrario, Humala negó la veracidad de las acusaciones vertidas en su contra y aseguró que las palabras de Montesinos sólo buscan beneficiar a su contrincante.
Promesas sorprendentes en el debate
En tanto, la celebración del debate electoral no estuvo exento de promesas y no empezó de la mejor manera. El candidato de
Las promesas brillaron tanto de un lado como de otro algunas de dudoso cumpliento. Humala, en un golpe de efecto al final del encuentro, sorprendió a todos cuando aseguró que, si llega a
También dijo que dará plena vigencia a
Su rival, que hasta ahora sale favorecido en las encuestas, fue atacado en varias otunidades Humala, que le pedía explicaciones su gestión durante su mandato entre 1985 y 1990. Pero García recordó su estilo autoritario y sus nexos con Hugo Chávez y Evo Morales y las consecuencias que una política silar puede generar en el país. “El fondo del asunto es si un país sí solo puede generar más empleo y desarrollo. Sólo Chávez en Venezuela con sus millones puede hacerlo, y cuando se quiere aplicar una política al estilo de Evo Morales, lo único que se va a generar es más desempleo y desigualdad”, dijo García.
La segunda vuelta electoral peruana tendrá lugar el 4 de junio próxo. Sólo entonces podremos calibrar los efectos reales de este intercambio de acusaciones y de la intervención de Montesinos.
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