El juez Baltasar Garzón dejó ayer en libertad bajo fianza de 4.000 euros al director editorial del grupo vasconavarro ‘Diario de Noticias‘, Pablo Muñoz, presunto mediador que colaboraban con la red de extorsión de ETA para el cobro del llamado ‘puesto revolucionario’ a empresarios. Muñoz contará con cinco días para depositar la caución y eludir la cárcel. El empresario del ‘Diario de Noticias, rotativo en plena expansión tras ampliar su cabecera en dos ediciones en distintas provincias del País Vasco, está acusado de colaboración con banda armada.
El juez Baltasar Garzón dejó ayer en libertad bajo fianza de 4.000 euros al director editorial del grupo vasconavarro ‘Diario de Noticias’, Pablo Muñoz, presunto mediador que colaboraban con la red de extorsión de ETA para el cobro del llamado ‘puesto revolucionario’ a empresarios. Muñoz contará con cinco días para depositar la caución y eludir la cárcel. El empresario del ‘Diario de Noticias’, rotativo en plena expansión tras ampliar su cabecera en dos ediciones en distintas provincias del País Vasco, está acusado de colaboración con banda armada.
Garzón, que le interrogó durante más de tres horas y media rebajó la petición del fiscal Juan Antonio García Jabaloy quien solicitó una fianza de 12.000 euros puso al periodista la obligación de comparecer semanalmente y le prohibió abandonar España. Muñoz, nada más conocer que
La controversia viene suscitada tras el anuncio de su colega Vicente Zaragüeta, vicepresidente del consejo de Administración de ‘El Diario Vasco’, quien explicó en la comisaría de
Pablo Muñoz, director de ‘Diario de Noticias de Navarra’ y ‘Noticias de Gipuzkoa’ y director editorial de Grupo Noticias, fue arrestado el pasado miércoles día doce de julio, según indicó Europa Press citando fuentes del Consejo de Administración y dirección de Grupo Noticias, ‘sin ni siquiera dar la más mína información a sus familiares y sin asistencia letrada’. Tras registrar su casa, Muñoz fue trasladado hasta la sede de ‘Diario de Noticias’ en Huarte, donde la policía dio comienzo al registro de su despacho. En solidaridad, sus compañeros abandonaron el local y permanecieron en la calle hasta las 20.00 horas, momento en que Muñoz fue sacado del periódico entre aplausos e introducido en un coche para ser trasladado a Madrid.
Con motivo de la detención del periodista,










