El Hospital Universitario de Getafe educa sanitariamente a los niños con diabetes ya que resulta prescindible para el buen control de la enfermedad, de forma que el niño y la familia aprendan a convivir con ella. El Hospital destina para esta labor una enfermera con formación científica en esta enfermedad, y en concreto en la diabetes mellitus tipo I.
El Hospital Universitario de Getafe educa sanitariamente a los niños con diabetes ya que resulta prescindible para el buen control de la enfermedad, de forma que el niño y la familia aprendan a convivir con ella. El Hospital destina para esta labor una enfermera con formación científica en esta enfermedad, y en concreto en la diabetes mellitus tipo I.
Aprovechando las vacaciones veraniegas, la educadora en diabetes el Hospital colabora con
Para hacer más sencillo y atractivo el aprendizaje, la educadora mezcla teoría y práctica con métodos didácticos y divertidos adecuados a cada edad. Ha inventado un personaje, el osito “Gupi”, que enseña a diferenciar los alentos y las cantidades y que además protagoniza el cuento del Pie Diabético, en el que destaca la tancia que supone para este tipo de pacientes el cuidado de esta parte del cuerpo.
La incoración de la educadora de diabetes al Servicio de Pediatría suma un nuevo índice de calidad y se une a otras iniciativas del Hospital Universitario de Getafe que trabaja alcanzar los mejores resultados posibles. Además de optizar el tiempo médico, la labor de Enfermería supone para los pacientes y sus familiares una serie de mejoras tantes, el control de la diabetes es obviamente una de ellas, pero ha de destacarse la seguridad que transmite a todos los plicados el hecho de saber que existe una persona destinada a resolver sus dudas y a educar al niño diabético para que aprenda a llevar una vida normal, lo que repercute directamente en un beneficio global para el paciente.
La diabetes en la vida diaria de los niños
El trabajo de la educadora en diabetes se centra en dos objetivos: educar al paciente y a su entorno más cercano cuando se le diagnostica la diabetes, ayudándoles en la aceptación de que se trata de una enfermedad crónica y, en segundo lugar, realizar un seguiento tras el alta hospitalaria para enseñar al niño y a la familia a ajustar la insulina y la dieta a su rutina diaria, ya que el control de la diabetes mellitus tipo 1 la colaboración del paciente y la familia es fundamental para el buen control metabólico.
Tras el periodo de formación hospitalaria todos, niños y familiares, están perfectamente mentalizados sobre cómo tienen que realizar el autocontrol pero, tras un tiempo en su domicilio, relajan los conceptos que habían adquirido, llegando en ocasiones a transgredir los consejos médicos, lo que supone un empeoramiento en su control metabólico. Por este motivo, es absolutamente prescindible continuar la educación sanitaria, para que reafirmen sus hábitos alentarios y no se relajen en la administración de insulina y el ejercicio físico.
Cuando se da un debut diabético, es decir, cuando aparece prera vez la enfermedad, se ingresa al niño el menor tiempo posible, estancia que se aprovecha para enseñarle a comer una dieta variada valorando las raciones de hidratos de carbono. El niño también aprende a administrarse la insulina y a adquirir los conocientos básicos sobre su enfermedad. Por últo, se trata de ayudar a todos los plicados a aceptar una vida normal si sigue los consejos aprendidos.
La educadora de diabetes pasa consulta todos los días de la semana y atiende telefónicamente a los padres y pacientes para solucionar aquellos problemas o dudas que se les puedan presentar. Desde que comenzó su labor en septiembre de 2005 se han realizado 851 consultas y se han atendido más de 400 llamadas telefónicas.
Refuerzo de la formación
La diabetes se caracteriza un déficit en la producción de la hormona insulina secretada el páncreas, lo que produce una inadecuada utilización de la glucosa. Es una enfermedad crónica con la que el paciente convive gracias a al administración de fármacos o a la inyección de insulina, pero en el caso de no controlarse puede llevar a graves complicaciones como la hipoglucemia (falta de glucosa en la sangre) o la hiperglucemia (exceso de glucosa en la sangre) que si no son tratadas a tiempo pueden suponer complicaciones tardías como neuropatías, retinopatías, afectaciones cardiovasculares o en el peor de los casos desembocar en un coma diabético; eso es vital que el paciente esté formado, entienda su situación y aprenda a manejarla.
En la actualidad el aumento de casos de diabetes es un hecho constatado debido, entre otros, a factores ambientales y cambios en los hábitos alenticios de la población. Por ello, el Hospital Universitario de Getafe, tratando de mejorar la formación sanitaria de Área sanitaria 10 (Sur de la región), colabora con quien lo solicite a través de esta educadora, que visita colegios y guarderías de la zona para que compañeros y profesores entiendan lo que le pasa al niño diabético y sepan cómo actuar en determinadas circunstancias.
