Clive Goodman, el periodista plicado en el escándalo de la supuesta interceptación de mensajes de teléfonos móviles de la Familia Real británica, compareció prera vez ante un tribunal de Londres.
Clive Goodman, el periodista plicado en el escándalo de la supuesta interceptación de mensajes de teléfonos móviles de
Goodman, de 48 años y responsable del seguiento de la realeza en el sensacionalista ‘News of the world’, está acusado de conspirar para piratear comunicaciones en un caso que podría afectar también a conocidos políticos, famosos y futbolistas del Reino Unido.
Goodman, que fue la semana pasada suspendido temalmente su periódico, el más vendido de este país y propiedad del magnate de origen australiano Rupert Murdoch, cometió presuntamente ese delito entre el 1 de enero del 2005 y el 9 de agosto del presente. Ataviado de un traje oscuro, el retero compareció ante el tribunal de Westminster en una vista de trámite para confirmar su nombre, edad y domicilio.
Según el dictamen del juez de turno, Tothy Workman, Goodman, que quedó en libertad bajo fianza, tendrá que testificar de nuevo el próxo 29 de noviembre, aunque esa audiencia se celebrará en el londinense tribunal penal de Old Bailey. También prestó testonio ante el juzgado de Westminster Glenn Mulcaire, de 35 años, quien está acusado de los mismos cargos que el periodista y quedó igualmente en libertad bajo fianza hasta su próxa comparecencia judicial.
El retero del dominical fue detenido el pasado día 8 junto a otros dos hombres, en aplicación de una ley que contempla como penas un máxo de dos años de cárcel, una multa o ambos castigos frente a este tipo de delitos. Goodman fue puesto en libertad bajo fianza, al igual que Glen Mulcaire, mientras un tercer individuo de 50 años, cuya identidad no se ha divulgado, fue liberado sin cargos en su contra.
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