LATAM (30/08/06) La presunta falta de solidaridad de parte de los directivos del diario El Nuevo Herald de Miami hacia el periodista José Antonio Évora generó que éste decidiera finalmente enviarles una carta donde renunciaba a su puesto de trabajo. Todo se generó a partir de la publicación en ese periódico de una entrevista a los conductores del programa radial El Vacilón de la Mañana, después de que en una de sus emisiones se mofaran e insultaran a Évora. El comunicador esperaba un rechazo explícito.
LATAM (30/08/06) La presunta falta de solidaridad de parte de los directivos del diario El Nuevo Herald de Miami hacia el periodista José Antonio Évora generó que éste decidiera finalmente enviarles una carta donde renunciaba a su puesto de trabajo. Todo se generó a partir de la publicación en ese periódico de una entrevista a los conductores del programa radial El Vacilón de
La entrevista, titulada “El Vacilón renovado y TV” y firmada Lena Hansen, apareció en la sección Sabores de El Nuevo Herald. En ella se recogían las declaraciones de Enrique Santos y Joe Ferrero, los anadores del espacio. La aparición de esta charla fue interpretada el periodista como un respaldo explícito a los contenidos de “El Vacilón…”.
Evora dijo haber conversado informalmente con el abogado de la compañía, Robert Beatty, para que lo asesorara, pero asegura en la misiva que “después el director del diario, Humberto Castelló, habló con él sobre el asunto y Beatty le dijo que el caso no daba margen para una acción legal contra SBS”.
El periodista aseguró que ni Santos ni Ferrero se han disculpado ni pública ni privadamente ni con él ni con el El Nuevo Herald, pese a las palabras de grueso calibre proferidas en su contra y a llamar a quemar ejemplares del rotativo, según indica en la carta.
“Siento, y así le expliqué (a su editora, Gloria Leal), que el periódico me dejó solo en un debate inconcluso, que inexplicablemente ha pasado alto agresiones flagrantes contra un miembro de su equipo y contra el periódico mismo, y que luego acepta promover a los agresores sin exigirles que se retracten de sus infamias”. Por ello, Evora estó que su renuncia era “forzosa”, que la polémica entrevista abrió una “brecha infranqueable” entre él y el diario para el que trabajaba.
El programa “El Vacilón de
