El futuro del actual presidente de la Gestora de Marbella, MARTÍN REYES: Si el PSOE gana las elecciones en Marbella conseguirá una consejería de
El que fuera titular del Juzgado de Prera Instancia número 10 de Málaga, José Antonio Ruiz Ortuño, no guarda precisamente un buen recuerdo de Martín Reyes. El pasado año la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) condenó a 10 años de inhabilitación «para empleo o cargo público que plique el desempeño de funciones judiciales» al mencionado juez un delito de prevaricación judicial, cometido al abrir expediente al actual presidente de la gestora marbellí, tras un juicio en el que el abogado ostentó los intereses contrarios a los de la mujer del magistrado.
Después de la vista, la esposa del juez comentó a su marido que Martín Reyes había efectuado comentarios alusivos ‘a su persona y cargo’, lo que movió a Ruiz Ortuño a abrirle un expediente gubernativo, que se vio obligado a archivar en menos de un mes.
El juez no se detuvo el hecho de que los comentarios se hubieran producido en un juzgado ajeno a su competencia, ni tampoco se planteó contrastar los datos que tenía con la magistrada responsable, ya que según manifestó él mismo en su prera declaración ante el TSJA, lleva 36 años casado con su mujer y tiene ‘plena confianza en ella’.
Entre las transcripciones del juicio, el juez no halló ningún tipo de alusiones ‘a su persona y cargo’, lo que se vio en la obligación de dar carpetazo al expediente. El abogado Martín Reyes decidió entonces presentar una querella prevaricación ante el TSJA.
Además de la pena de inhabilitación, el TSJA puso al juez una multa de 2.160 euros y le condenó a indemnizar de manera sbólica al letrado expedientado en concepto de responsabilidad civil con la cantidad de un euro.
La cita electoral del 27 de mayo de 2.007 marcará el futuro inmediato de Martín Reyes. Su entrega a la causa marbellí puede tener una suculenta recompensa. Acceder a la Junta de Andalucía en calidad de consejero, siempre y cuando el PSOE consiga la alcaldía de Marbella. Un rechazo del electorado a los socialistas propiciaría la elección del gestor marbellí como Eurodiputado.
