En el transcurso de los últos meses la situación de aislamiento y descrédito de Tito Drago, su lugarteniente Mohamed Abdelkefi y el cesado tesorero Miguel Ángel San Martín, han llevado al CIP a una situación sumamente complicada. Y es que situaciones como la no distribución del anuario del CIP han herido de gravedad la credibilidad de este grupo de disidentes. Con pocos socios y con autoridades, patrocinadores e invitados que aún esperan la realización de la anunciada entrega de Premios del CIP, el futuro de la institución se ha visto seriamente comprometido.
En el transcurso de los últos meses la situación de aislamiento y descrédito de Tito Drago, su lugarteniente Mohamed Abdelkefi y el cesado tesorero Miguel Ángel San Martín, han llevado al CIP a una situación sumamente complicada. Y es que situaciones como la no distribución del anuario del CIP han herido de gravedad la credibilidad de este grupo de disidentes. Con pocos socios y con autoridades, patrocinadores e invitados que aún esperan la realización de la anunciada entrega de Premios del CIP, el futuro de la institución se ha visto seriamente comprometido.
Las informaciones llegadas hasta PRNoticias indican que el actual CIP se ha posicionado como una institución que no cumple, hoy, después del golpe, una serie de requisitos legales que bloquea el accionar de la totalidad de la junta de disidentes autoproclamada y secundada Tito Drago. La siguiente es una cronología detallada donde se pueden constatar éstas y otras irregularidades
Lunes 22 de mayo de 2006: Últa reunión de
Votos y sorpresivas presencias: En esta reunión se personan Tito Drago y Miguel Ángel Bastenier manifestando la recuperación de sus respectivos votos a pesar de sus disiones. De hecho el acta recoge numerosos acuerdos que desde un punto de vista legal son nulos la voz y voto de dos miembros que habían renunciado con anterioridad y que se presentan para engordar la cantidad de votos en contra del Presidente Frank Smith.
Lunes 5 de junio de 2006: Reunión de
Un tribunal de ética de facto al más puro estilo de otros tiempos: al no existir un reglamento de esta comisión resulta más difícil profundizar en ella. De todos modos se produce una reunión en la que no se convoca fehacientemente a quienes quieren que se declare, ante una comisión de investigación que se reúne sin ser solicitada
Una mera comisión se autoconvierte en órgano judicial, donde se comenten diferentes errores y actos de enjuiciamiento, y la convocatoria de los asistentes de una comisión que no posee facultad alguna ni para auto convocarse ni para sentenciar penas de castigo a socios del CIP que no resultan en ese momento de agrado de Drago y sus secuaces.
Mañana continuaremos con la cronología de los acontecientos
Seguiremos Informando…










