Caffarel, en la recta final al mando de RTVE

El vies, el Consejo de Administración de la SEPI anunciaba que Carmen Caffarel será la administradora provisional única de la nueva Coración de RTVE hasta que las Cortes nombren el nuevo Consejo. Un balance de luces para uno de los periodos más turbulentos de la vida de RTVE.

El vies, el Consejo de Administración de la SEPI anunciaba que Carmen Caffarel será la administradora provisional única de la nueva Coración de RTVE hasta que las Cortes nombren el nuevo Consejo. En ese momento,  la Directora General del Ente durante los últos dos años, probablemente dejará su cargo para volver a la vida académica. Un balance de luces para uno de los periodos más turbulentos de la vida de RTVE.

Caffarel lo deja. Una noticia que ya se sabía hace meses, pero que ahora se ha hecho oficial, a no ser que la Directora General quiera presentarse a la reelección, algo bastante probable visto el panorama actual. Carmen Caffarel, profesora de prestigio en esto de la Comunicación quería irse de RTVE hace mucho tiempo, en parte las presiones externas y también el lógico desgaste que le genera uno de los cargos con mayor exposición mediática del panorama televisivo.

Caffarel vuelve a la vida académica y probablemente a un puesto de relevancia en la Universidad Rey Juan Carlos. Mientras, su balance, en sus poco más de dos años al mando del Ente Público, tiene más sombras que luces. Caffarel, independientemente de su responsabilidad en los hechos, ha presidido RTVE en uno de los momentos más complejos de su historia reciente.

La profesora Caffarel ha debido enfrentar una parable caída en la audiencia de La Prera y La 2, la pérdida del norte de la función pública del Ente, una parrilla de programas que cambia con las semanas, decenas de proyectos televisivos fracasados, una deuda que sigue aumentando a razón de 600 millones de euros anuales y la sustitución de programación propia para dar cabida a decenas de productoras que han generado el rechazo de los trabajadores de Ente. 

Sin considerar los constantes enfrentamientos de Caffarel con los sindicatos, su política de contratación de programas, de programación de espacios y de relación con los trabajadores, tenemos un canal que ha perdido su liderazgo de audiencia en prácticamente todas las franjas horarias, una radio que no es capaz de competir con las demás ofertas comerciales y ofertas programáticas que son cada vez menos atractivas para el espectador, pérdida de eventos detivos emblemáticos, incluida.

En medio de todos estos problemas, Caffarel y la SEPI han intentado solucionar la deuda crónica del Ente, encabezando un ERE antológico que dejaría a un 40% de la actual plantilla fuera del canal y una nueva Coración de televisión ad tas. La idea es que este nuevo Ente nazca saneado y sin el lastre que significa la actual estructura organizativa, de tintes faraónicos para una televisión del siglo XXI, aunque sea pública, como es este caso.

Es pronto para culpar a Caffarel de todos estos males, aunque muchos nos preguntamos que pasó con el cacareado informe de los Sabios, del que sabemos no se han considerado muchos folios para la refundación del Ente Público. Sólo sabemos que de ahora en adelante la nueva Coración tendrá un capital social más pequeño, una estructura de plantilla más reducida y menos centros territoriales. También sabemos que la nueva Coración que verá la luz en 2007, nacerá sin deuda y que será financiada con los Presupuestos Estatales y con un centaje minoritario de publicidad.

Lo que no sabemos tampoco es hasta que punto Caffarel ha colaborado en todo este proceso de reformas y en que magnitud ha participado en la toma de decisiones. Caffarel vuelve a la academia y el Ente sigue su curso. Veremos si todas las reformas que se han pulsado, servirán para dar a RTVE un pulso de modernización necesario, aunque muchos no sepamos cuá será el rumbo que tomará el Ente.

Seguiremos Informando…