Los conocidos como ‘canillitas’ que distribuyen la prensa en las calles se han puesto en pie de guerra la política de suscripciones del rotativo que habría repercutido en una disminución de sus clientes.
El gremio de los voceadores, aunque dividido, ha logrado bloquear la distribución del diario, llegando a pedir que la empresa lo haga con sus propios trabajadores, que en algunos casos han sido agredidos. El domingo la mañana varios manifestantes del gremio fueron a manifestarse frente al edificio del periódico para pedir que la empresa cumpla con su promesa de revertir la campaña de suscripción. La sede tuvo que ser resguardada varios efectivos de la policía y algunos trabajadores.










