El largometraje rescata los tres últos años de vida del compositor, en los que la soledad y la ceguera no pidieron que creara una de sus obras más emblemáticas, la ‘Novena Sinfonía’.
Anna Holtz (Diane Kruger), de 23 años, es una aspirante a compositora con pocos medios que intenta encontrar inspiración y prosperar en la capital mundial de la música, Viena. Anna, que estudia en el conservatorio de música, consigue una recomendación para trabajar en una reconocida editorial, y, tras una serie de acontecientos inesperados, se las ingenia para conseguir una otunidad de trabajar junto al mayor y más voluble artista vivo: Ludwig van Beethoven (Ed Harris).

Cuando, provisadamente, el escéptico Beethoven la pone a prueba, Anna demuestra sus dotes y su especial valía para la música. El maestro decide aceptarla como copista, lo que da comienzo a una extraordinaria relación que cambiará la vida de ambos.
Aunque en un principio no logra comprender del todo ese nuevo idioma musical, la obsesión de Anna con Beethoven consume su vida, amenazando con consumir también su relación con su adinerado pretendiente, Martin Bauer (Matthew Goode).

Martin, arquitecto, ingeniero y científico en cies, desconfía de Beethoven y ve con cierto recelo el deseo de Anna de adentrarse en el mundo de la composición, un mundo de hombres.
La película introduce al espectador en la silenciosa soledad de la vida de Beethoven a través de los ojos de Anna Holtz, un personaje ficticio basado en personas reales de la vida de Beethoven o del panorama musical europeo de la época. Para construer a Holtz se basaron en una compositora asentada en Francia, Lorenç Ferenz, que estuvo muy influenciada la música del genio, y otra mujer que apareció el día del estreno de la ‘Novena Sinfonía’ y dio la vuelta a un Beethoven totalmente sordo para que viera los aplausos de la gente.

En la banda sonora hay música tocada con instrumentos de principios del siglo xix, que tenían un diseño y unas afinaciones diferentes a los actuales. Los arcos del violín y el chelo, ejemplo, tenían unas curvaturas características que requieren una técnica diferente a la que se utiliza hoy día. Algunos de esos instrumentos de época aparecen en el escenario del Teatro Katona Jozsef durante el rodaje de
Para iluminar el teatro, decorado con madera oscura y colores rojos, se utilizaron 600 velas, y fueron necesarias ocho personas para encenderlas y apagarlas rápidamente entre toma y toma.
SOBRE EL REPARTO
ED HARRIS (Ludwig van Beethoven) su interpretación en Las horas fue candidato en
DIANE KRUGER (Anna Holtz) hizo su debut cinematográfico internacional interpretando a la legendaria Helena, en Troya.
MATTHEW GOODE (Martin Bauer) trabajó junto a Scarlett Johansson y Jonathan RhysMeyers en la últa película de Woody Allen, Match Point, que se presentó en el Festival de Cine de Cannes.
AGNIESZKA HOLLAND (directora) se la conoce sobre todo dos películas, ambas candidatas a los premios Oscar: Europa, Europa, candidata en
Lo mejor: destaca la increíble caracterización y suble interpretación de Ed Harris, quien se adentra tanto en el personaje convencer al público que está ante el propio Beethoven. El propio Harris dedicó muchos meses a practicar piano y violín, estudiar dirección musical y leer ávidamente libros sobre la vida y obra de su personaje










