(30/10/06) La semana pasada algunos medios de comunicación se preguntaban dónde estaba Fidel Castro y a qué se debía que no apareciera ninguna agen que reflejara su recuperación. No fueron pocos los que especularon, otra vez, con la posible muerte del dictador cubano, que se está acostumbrando a aparecer cuando los rumores están a punto de causar estragos. Delgado, caminando lentamente, pero con el carácter de siempre, Castro reaparecía en un video en el que hablaba teléfono y leía la prensa.
Desafiante, el gobernante dado muerto en varias ocasiones se mostró irónico ante las versiones que, nuevamente, le daban muerto. ‘Vamos a ver qué dicen, ahora tendrán que resucitarme, ¿no?’ y aclaró que este tipo de noticias lo estulan para seguir recuperándose. Con indumentaria detiva, el mandatario aparecía caminando titubeante y con paso lento. Físicamente no está en su mejor momento. Para despejar cualquier duda, Castro leía también las últas ediciones de los periódicos oficialistas: Juventud Rebelde y Granma.
Castro ha insistido en que su recuperación será lenta y con riesgos, aunque todavía no se sabe a ciencia cierta cuál es la causa de su enfermedad, que lo obligó a delegar todos sus poderes en su hermano, Raúl, cuando debió ser sometido a una operación de urgencia el pasado agosto, debido a una hemorragia intestinal.
