La Iglesia catalana se plantea realizar una campaña publicitaria específica, con el objetivo de qu los contribuyentes financien la institución a través de la declaración de la renta.
La Iglesia catalana se plantea realizar una campaña publicitaria específica, con el objetivo de convencer a los contribuyentes para que financien la institución, a través de la declaración de la renta. El acuerdo deberá ser aprobado el Congreso.
La Iglesia catalana estudia lanzar una campaña publicitaria específica con anuncios en televisión y prensa, para dar a conocer sus actividades, con el objetivo de convencer a los contribuyentes de que marquen la casilla de la declaración de la renta que financia esta institución. La iniciativa, se encuentra en fase de estudio y deberá ser aprobada el Congreso.
El Gobierno español y la jerarquía eclesiástica han llegado a un acuerdo para modificar el modelo de financiación que regía desde 1979 y que prevé elinar la atación directa que la Iglesia recibía de los presupuestos del Estado y, a cambio, se incrementará el centaje que recibe a través del IRPF, que pasará del 0,52% actual al 0,7%.
Joaqu Fortuna, ecónomo de Tarragona y coordinador de los ecónomos de la Tarraconense, ha justificado la necesidad de realizar una campaña publicitaria específica para Cataluña, diferente a la que se estudia elaborar para el conjunto del Estado, la ‘especial sensibilidad’ de la población catalana y el ‘diferente lenguaje’ que utiliza. Según los números que ha facilitado Fortuny en conferencia de prensa, la asignación económica vía IRPF y Presupuestos del Estado que recibieron en 2005 las 10 diócesis catalanas ascendió a unos 14 millones de euros, de los que un 88% procedieron de la atación de las rentas de los contribuyentes.
Pese a la tancia de esta atación, el 69% de los recursos globales que recibió la Iglesia catalana en 2005 fueron ataciones de los fieles a partir de donativos y otros conceptos, partida que ascendió a 56 millones de euros, mientras que las rentas patroniales facilitaron siete millones más. En el capítulo de gastos, el 28% del presupuesto del año pasado fue a parar a retribuir a los sacerdotes y el personal seglar que trabaja para la Iglesia (30 millones de euros), mientras que la actividad pastoral y la asistencial recibieron 13 millones de euros.
Por otro lado, la conservación de los edificios de la Iglesia costó 10 millones de euros, y las ataciones a acciones solidarias tanto nacionales como internacionales se llevaron otros 10 millones, entre otras partidas de gasto.