La Convención Internacional de Derechos de las Personas con Discapacidad ya ha sido adoptada la Asamblea General de la ONU. No entrará en vigor hasta que no se adhieran, al menos, 20 países, lo cuál podrá ser a partir del 30 de marzo de 2007.
La Convención Internacional de Derechos de las Personas con Discapacidad ya ha sido adoptada la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU), lo que este Tratado se convierte en el prero, en lo que a derechos humanos se refiere, del Siglo XXI. Esto no entrará en vigor hasta que no se adhieran, al menos, 20 países, lo cuál podrá ser a partir del 30 de marzo de 2007.
El Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI) ofrece las claves para entender este Acuerdo, que pretende dar visibilidad al colectivo de la discapacidad, dentro del sistema de protección de derechos humanos de Naciones Unidas.
La Convención quiere cambiar el paradigma de la discapacidad. Con el Documento quedan reconocidos los derechos civiles y políticos como el derecho a la vida, a la libertad, a la igualdad y a la integridad física y psíquica, entre otros. También se garantizan los económicos, sociales y culturales relativos a la educación, el empleo, la accesibilidad y la calidad de vida.
Algunas de las obligaciones que supone la validación del Texto son, ejemplo, la construcción de nuevos edificios con accesibilidad universal, la promoción y mejora del acceso a la educación y la información parte de las personas con discapacidad, y la no discrinación de las mismas.
Aunque la Convención reconoce que los países necesitarán algún tiempo para aplicar plenamente estas disposiciones, esto deberá beneficiar a más de 650 millones de personas que padecen discapacidad, lo que equivale al 10% de la población mundial.
Todo esto forma parte de un largo proceso en el que participaron Estados miembro, Obervadores y Cuerpos y organizaciones tantes de la ONU, Relator Especial sobre Discapacidad, instituciones de derechos humanos nacionales, Organizaciones No Gubernamentales (ONG’s). Por su parte, Ana Pelàez, comisionada de Mujer con Discapacidad del CERMI, participó activamente en la últa sesión del Comité Especial de la ONU.
Ahora, el CERMI se dirigirá al Gobierno español y al resto de gobiernos de la Unión Europea para solicitar que ratifiquen cuanto antes el texto y pueda, de este modo, entrar en vigor y resultar aplicable lo antes posible.
