Cansada de que la empresa de comida rápida desobedeciera una y otra vez el acuerdo firmado el Ministerio de Sanidad y Consumo y la FEHRCAREM, Elena Salgado ha anunciado hoy que rompe definitivamente el convenio con Burger King.
Cansada de que la empresa de comida rápida desobedeciera una y otra vez el acuerdo firmado el Ministerio de Sanidad y Consumo y
Lo ha hecho durante la presentación del informe ‘Nutrición, actividad física y prevención de la obesidad’ que reúne las conclusiones de los trabajos de un grupo de expertos en nutrición durante los dos últos años.
La ruptura de este convenio no ha cogido a nadie sorpresa, ya que llega después de un otoño cargado de polémica, donde la confrontación entre la empresa y el ministerio la aparición mediática de las hamburguesas XXL, con el triple de ca que una normal, ha sido una constante. A este hecho se le ha unido la aparición de una publicidad que, para bien o para mal, ha conseguido no dejar indiferente a ninguno de los que la han visto.
Sanidad rompe el acuerdo no sólo con Burger King, sino también con
Pero a pesar del pacto mediático que la guerra entre Burger King y Salgado ha tenido, es difícil precisar las consecuencias que ésta ha tenido en el consumo de hamburguesas. En teoría que su rival McDonalds afirme sentirse preocupado los problemas de obesidad y se integre dentro de una campaña contra esta enfermedad debería mejorar la agen de marca de esta en contra de la otra.
Sin embargo, en la práctica, esto no siempre tiene los efectos que deberían tener. A muchos de quienes consumen hamburguesas habitualmente poco les tan las guerras burocráticas: sólo quieren comerse a gusto una ‘buena’ hamburguesa.










