En la Tierra a jueves, diciembre 18, 2025

Luces y sombras en el primer año de la ley Antitabaco

Justo hace un año el Boletín Oficial del Estado publicaba la controvertida Ley Antitabaco. Era 28 de diciembre, pero no, no se trataba de una inocentada, aunque muchos debieron pensarlo en algún momento, sino la propuesta más arriesgada de la Ministra de Sanidad, que pretendía con ella acercar nuestra legislación a las de otros países europeos.

Justo hace un año el boletín Oficial del Estado publicaba la controvertida Ley Antitabaco. Era 28 de diciembre, pero no, no se trataba de una inocentada, aunque muchos debieron pensarlo en algún momento, sino la propuesta más arriesgada de la Ministra de Sanidad, que pretendía con ella acercar nuestra legislación a las de otros países europeos.

 

Un año después una encuesta del CIS ha revelado que la ley cuenta con el apoyo de dos de cada tres españoles, aunque la mayoría, un 60% no cree que esta norma haya supuesto una reducción del número de fumadores. Sin embargo los datos señalan un tímido descenso del número de fumadores que ha bajado un 8%, dos puntos más que el año pasado.

 

También las cifras de las tabacaleras demuestran que el consumo de tabaco ha disminuido en los últos meses. A 30 de noviembre los estancos habían reducido un 3,14 sus ventas con respecto a 2005. Pero el tabaco no ha sido el más perjudicado con esta ley. La venta de puros es la que más ha descendido este año, sufriendo un recorte del 7,78%.

 

El motivo de este descenso es que muchos habituales de los puros han tenido que dejar de fumarlos en el trabajo, ya que el tiempo que se necesita para fumarse un habano supera con creces los 5 minutos de descanso que uno puede tomarse en el trabajo cada cierto tiempo.  

 

Así que lo de fumarse un puro ha tenido que dejarse para los bares, donde la incidencia de esta ley ha sido, sin duda, mína, tal y como lo demuestra el hecho de que sólo 40.000 de los más de 300.000 establecientos de hostelería hayan decidido convertirse en un espacio libre de humo.  

 

Los bares, así como algunas comunidades autónomas presididas el PP, con el Madrid de Aguirre a la cabeza, se han convertido en el particular talón de Aquiles de la cruzada antitabaco de la ministra, que en lo que va de año ha recurrido cuatro decretos autonómicos.

 

Quizá que la realidad finalmente ha sido diferente a como se pintaba hace justo un año el revuelo que la citada ley causó en su momento ha ido poco a poco apaciguándose. Pero aunque la flexibilidad de la ley, en comparación con países como Italia o Irlanda, ha permitido que el momento los fumadores no sean proscritos, quien sabe que pasará con el tiempo.

 

Lo últo es que a partir de 2007 los bares y restaurantes tendrán que instalar un mando a distancia en las máquinas expendedoras, medida con la que se trata de evitar el consumo de menores. De no cumplirse, los locales se enfrentarían a sanciones. Pero aunque esta norma entra en vigor en unos días son muchos los hosteleros que aún no han adaptado este mecanismo. Sólo en Cataluña más del 40% de las maquinas no cuentan aún con el sistema.

 

Seguiremos Informando…

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