La FIP calificó el año 2006 como ‘trágico’ para los medios de comunicación, con una cifra récord de 155 periodistas y sus colaboradores víctas de homicidio y asesinato.
La FIP calificó el año 2006 como ‘trágico’ para los medios de comunicación, con una cifra récord de 155 periodistas y sus colaboradores víctas de homicidio y asesinato o muertos en circunstancias sin aclarar.
‘Los medios se han hecho más poderosos y el periodismo se ha hecho más peligroso’, afirmó en una nota el secretario general de la FIP, Aidan White, quien denunció la persecución y la brutalidad sin precedentes contra la prensa, así como la punidad de los responsables de estas muertes. Según White, la FIP incluye en la cifra de víctas tanto a los periodistas como a sus colaboradores, entre ellos intérpretes y conductores.
El mayor número de muertos se produjo en Irak, donde 68 miembros de los medios cayeron en atentados terroristas o fueron víctas de errores militares, lo que eleva a 170 la cifra de periodistas y colaboradores fallecidos en ese país desde la invasión estadounidense de abril de 2003, según la FIP. Sin embargo, en 2006 la mayoría de las víctas en Irak fueron causadas terroristas y grupos sectarios que han convertido las calles de Bagdad y de la mayoría de las grandes ciudades en intransitables para la prensa.
En Latinoamérica, en particular en México, Colombia y Venezuela, la violencia se cobró las vidas de 37 profesionales de la prensa, mientras que en Asia la cifra fue de 34, la mayoría en Filipinas y Sri Lanka. México fue el país latinoamericano más peligroso, con la muerte de 10 reteros que investigaban crímenes y casos de corrupción, añadió la FIP.
La punidad en estos crímenes no se lita a las zonas de conflicto, señaló la FIP, que recordó el asesinato el pasado 7 de octubre de la periodista rusa Anna Politkovskaya, muy crítica con la política del presidente ruso, Vladir Putin, en Chechenia. Según la Federación, que agrupa a más de 500.000 profesionales de 100 países, desde que Putin llegó al poder en Rusia hace siete años han sido asesinados unos 40 periodistas sin que sus casos hayan sido aún resueltos de forma satisfactoria.
La única noticia positiva en 2006 fue la condena sin precedentes hecha a finales de año la ONU contra la persecución de la prensa y su llamamiento para que los responsables sean llevados ante la Justicia, añadió la nota de la FIP. Además de los 155 periodistas y colaboradores que cayeron víctas de la violencia, otros 22 reteros perecieron en accidentes durante el ejercicio de su profesión en 2006, según el informe de la FIP, titulado ‘El periodismo bajo la espada’ y que será publicado en su totalidad a mediados de enero.
EFE