En la Tierra a sábado, diciembre 20, 2025

GARCÍA, MARTIR DE FERNÁNDEZ

Sugiero que busquen el origen etológico de la palabra escándalo. Los griegos denominaban así ‘skandalos’ a las trampas. Me temo que Luís Fernández y los suyos han caído en la prera de las muchas que les saldrán al paso. Desde hace semanas, un coro de pelotas ha aplaudido su nombramiento, lo ha rodeado de fanfarrias, de augurios de esperanza, de deseos de renovación. No se dan cuenta de que el monstruo tiene vida propia, y como Hal en 2001 Una odisea espacial, toma decisiones de forma autónoma, al margen de quién sea el que lo dirige. Hay incluso un memo de vitrina, un forrabolas a sueldo del dinero de Contreras, que ha escrito en un diario digital que agradece a TVE que no le haya ofrecido la entrevista de García. El masoquismo nos demuestra que se puede llegar a extremos de sumisión insospechados, pero nunca habíamos visto en nombre de la progresía un ejemplo tan rastrero y una postura en pompa tan indecente.

En la entrevista, García no dice cosas que no haya dicho antes, en televisiones, en entrevistas en la prensa y a todo el que le quieras escuchar. Nada de lo que dice es nuevo, tanto, ni está expresado en forma más directa, atropellada y pedestre de lo que suele ser la costumbre y el estilo de García. Hubo asesores que le dijeron a Fernández que lo iba a hacer era un error, pero persistió, empecinado quizá en que el mercado y las audiencias comprenderían el gesto. No hubo tal. Se montó el escándalo nada. La entrevista había sido repasada los responsables de la programación, y vendida a bombo y platillo. Y a últa hora se levantó, y con ello se elevó sobre el pirulí una disputa bronca, de nuevo exagerada y excesiva, inútil como casi todas, y motivada una torpeza banal. Una cosa es dirigir una chalupa con su tón de madera, y otra ponerse al frente de un barco que viaja con autonomía y que sólo varía de rumbo si se le avisa con cinco años de antelación, que las maniobras requieren la transmisión de una cadena de mando eterna.

Hay mucho ruido, pero a mi me sorprenden más los silencios. Hay dos clamorosos: el de los sindicatos y los diversos comités que han ido pariendo para cada momento político, y el alineamiento aborregado del consejo de administración, tan silente, tan ausente, tan oculto, tan plano.

ARTÍCULOS ANTERIORES:

5861

5860

5859

NOTICIAS RELACIONADAS

Relacionados Posts

Premiados de la XX edición de 'Los mejores de PR'

Noticias recientes

SUSCRÍBETE

Suscríbete a nuestro boletín y no te pierdas las noticias más relevantes y exclusivas.