IMANOL ARIAS vuelve ha hacerse con la estatuilla más preciada de la televisión al MEJOR ACTOR. Los TP de ORO, otorgados la audiencia vuelven a reconocer a los actores de Cuéntame cómo pasó (ANA DUATO también se ha hecho con el premio a
¿Cómo ves el futuro de la televisión en España?
La TDT va a dar muchas posibilidades de tener canales temáticos. Va a ser una oferta muy amplia. La pregunta para mí es ¿Cuál de esa televisión temática se incorará a la televisión del hogar? ¿Cuál será interactiva? ¿Para qué servirá? Va a ser muy novedoso y habrá cosas que nos aginemos. Yo espero que cuando me pille mayor, que a los actores nos pillen la cara y hagan la serie con movientos de otros. Creo que va a cambiar aunque, en el fondo, hay algo que no cambia nunca: encontrando el techo de los espectadores, hay que darles en el corazón. Dependerá mucho de cómo se eduque en España a la gente, la Ley de Educación, para que la televisión gane en nivel o baje.
¿Cuál es el secreto de Cuéntame?
Que hacemos, en un formato televisivo, mucho talento televisivo. La televisión, además del éxito de todos los programas en directo siempre lleva detrás un cúmulo de talento artístico que en Cuéntame se puede manifestar: en la reconstrucción de la época, en elegir los guiones. Es una maquinaria que permita que haya mucho talento, mucha gente buena. Además tienen un horario en el que compite con algo más directo. Otra gran suerte de Cuéntame es compartir franja con un Reality que ninguno de los dos se ha echado nunca, y cada uno ha tenido su sitio. Es una buena idea para programar, intentar que las noches sean compatibles.
¿Cómo es la televisión ahora?
La televisión ahora es mucho mejor. Lo que pasa es que hay tantas horas de emisión que programar un canal las 24 horas con gente serie es posible económicamente. Por eso hay dos lados más oscuros: los “teleconcursos” de la noche, y las historias de “vida privada”. Aunque yo no lo llamaría así. Como no somos jueces no sabemos diferenciar entre el derecho a la intidad y el derecho a la propiedad intelectual. El problema es que se muestran vidas muy debajo de lo que el espectador debería tener. Pero la televisión en sí no es ni buena ni mala, que después de los horarios oscuros llegan los luminosos: los informativos son buenos, hasta los tendenciosos tienen que ir a la guerra y están ahí, aunque sea para contarlo mal. La televisión no es mala, sólo tiene zonas oscuras.
¿Se hace buen periodismo en televisión?
La televisión tienen una vinculación con el periodismo que la gente desconoce y es lo más tante: el texto, las palabras. Lo prero fue la palabra, lo dijo Cristo y lo dice










