Muchos son los trucos que los conductores van pasando boca a boca para evitar los controles de alcoholemia, pero, si la ruta alternativa ha sido descubierta y no queda más remedio que enfrentarse directamente al temido alcoholímetro, la picaresca española sale de nuevo a flote para ofrecer un largo listado de recetas milagrosas al más puro estilo de la botica de la abuela que pueden ayudar a evitar que el señor agente descubra que la tasa de alcohol es superior a la permitida.
Muchos son los trucos que los conductores van pasando la tradición oral para evitar los controles de alcoholemia, pero, si la ruta alternativa ha sido descubierta y no queda más remedio que enfrentarse directamente al temido alcoholímetro, la picaresca española sale de nuevo a flote para ofrecer un largo listado de recetas milagrosas al más puro estilo de la botica de la abuela que pueden ayudar a evitar que el señor agente descubra que la tasa de alcohol es superior a la permitida.
Una de las más conocidas es masticar granos de café, que puede paliar el olor a alcohol en el aliento, pero cuyos efectos para disminuir el nivel de alcohol en sangre son bastante dudosos. Otro recurrente también son los chicles, aunque hay quien es fetichista hasta para eso, puesto que no son útiles todos, hay quienes optan una marca específica como si fuese la única capaz de lograr el ansiado efecto. Los preferidos; los mentolados, cuanto más intenso sea su sabor, mejor.
Otra técnica bastante aplicada (con o sin conociento de causa) es beber justo antes de coger el coche, ya que el alcohol comienza a hacerse notar en sangre a los 20 minutos de ser ingerido y produce su efecto máxo una hora después, claro que este método tampoco resultaría efectivo si la ingesta de alcohol inmediatamente anterior a la subida al coche está precedida más alcohol un tiempo antes.
También hay quien cree que los productos farmacéuticos y parafarmacéuticos pueden ser de ayuda en este tipo de situaciones; hay dos fármacos que encabezan el ranking: el Almax (recetado los médicos como protector gástrico) y un producto llamado Resal, se trata en este caso de un complemento nutricional a base de piña, alcachofa, Grosella y Arándanos, que lleva, según los fabricantes Vitamina B1 y Vitamina B6 ayuda a reducir los síntomas producidos el alcohol y tabaco.
Eso es lo que dicen sus fabricantes, y algunos de los que lo han probado afirman que viene muy bien para evitar la conocida ‘resaca’ pero todo, al día siguiente. Su efecto (si es que lo tiene, y no se trata de un efecto placebo, ya que también hay quien afirma que no le ha funcionado) no se produce de forma instantánea. Su mérito consiste en ayudar a hidratar el cuerpo y en concreto, con la vitamina B6 (conocida como piridoxina o piridoxamina) se contrarresta su déficit producido el exceso de alcohol. Efectos que también pueden ser contrarrestados la vitamina C.
En cualquier caso, el único remedio probado para evitar la resaca es beber mucha agua antes y después de ingerir alcohol para hidratar el cuerpo. Aunque eso no evita dar positivo en un control de alcoholemia o, peor aún, provocar un accidente de tráfico. El único remedio efectivo para eso es no mezclar alcohol y conducción. Si bebes, no conduzcas.
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