La fragmentación de las audiencias ha traído consigo una guerra sin cuartel de las cadenas mantener sus niveles de inversión publicitaria. Y es que como hemos dicho en muchas ocasiones, la tarta es la misma mucho que las cadenas digan lo contrario. Los datos indican que las autonómicas son de momento las cadenas más perjudicadas con este nuevo reparto. En total sus ingresos publicitarios han caído un 2,6% en un año, y ya representa sólo el 12% del total de los 3.089 millones de euros que recibió la televisión durante el año 2006.
Los datos de Infoadex revelan que la inversión publicitaria en cadenas autonómicas ha caído un 2,6% hasta los 370,7 millones de euros durante 2006. Estas cifras se comparan negativamente con el creciento que ha tenido la publicidad en televisión y el salto de la inversión en las cadenas nacionales. Mientras el sector creció un 7,3%, las generalistas subieron hasta el 8,9%. La inversión en las cadenas temáticas creció en tanto un 41,7% hasta los 44 millones y las locales subieron un 12,1%.
Con estas cifras no es difícil darse cuenta que los grandes perjudicados con la fragmentación han sido las cadenas autonómicas, que han visto reducir en un punto su representación en la tarta publicitaria. En 2005, estas cadenas representaron el 13,2% del total, mientras que en 2006 sólo registraron el 12% de los 3.089 millones invertidos en todo el sector de la televisión. Los datos revelan además que los temores de las cadenas nacionales de perder cuota de mercado, quedan de momento en saco roto.
Dentro de las autonómicas, se ha dado la coincidencia de que todas han perdido inversión. TV3, la que más dinero recibe con 140,9 millones ha perdido un 2,5%, mientras que la segundo Telemadrid ha caído hasta los 60 millones, una bajada de 15,2%. También han perdido Castilla La Mancha TV (3,7%), Canal Sur (1,0%), ETB (4,9%), TVG (3,3%), Canal Nou (1,7%) y la autonómica canaria con un 3,3%.
Estas cifras también ponen en cuestión el verdadero modelo de financiamiento de las teles públicas. Las privadas siempre han criticado que estas televisiones no deberían recibir inversión publicitaria de ningún tipo, ya que su financiación debería depender exclusivamente de los fondos públicos. En la actualidad las cadenas autonómicas tienen un presupuesto que depende en gran medida de los gobiernos autonómicos. En algunos más del 70% de sus ingresos, aunque en otros, esta proción se invierte.
Muchas de ellas recurren a endeudamiento para continuar su marcha y el dato más esclarecedor de este problema es que casi todas las autonómicas cierran el año en números rojos. Es ello que de cara a este nuevo panorama audiovisual en que las cadenas autonómicas pierden publicidad, no sería mala idea replantear su modelo de financiación.
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