El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía ha dictaminado que los farmacéuticos también podrán ser objetores para la dispensación de la Píldora del Día Después, PSD, al reconocer que sus convicciones morales conforman su personalidad y es incompatible con las normas que ponga la comunidad.
Los farmacéuticos podrán objetar en sus Oficinas de Farmacia cuando se les pida que dispensen fármacos que atentan contra sus convicciones morales. Así lo ha determinado el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, TSJA, después de que las comunidades de Madrid y Andalucía decidieran asegurar que la Píldora del Día Después,PSD, pudiera dispensarse de manera gratuita en los servicios sanitarios públicos.
En aquel entonces, algunos de los titulares se negaron a dispensar este medicamento alegando que iba en contra de sus convicciones morales y éticas y la Junta de Andalucía les demandó que era obligatorio que fueran dispensadas.
Tras el juicio, el TSJA obliga, en su sentencia, que los Colegios profesionales estén comprometidos con la defensa de quienes hayan decidido declararse objetores ya que tendiendo que el cumpliento de una norma es incompatible con el respeto a su moral.
Esta objeción de conciencia ha sido reconocida de modo expreso a los médicos y personal sanitario en el tema del aborto y ahora se ha extendido a los boticarios con la dispensación de la píldora del día después.










