El diario Montanes publicaba un análisis que comenzaba con la alusión al trato de favor que la ley realiza en ocasiones. Los tratos de favor a los que hacía alusión el análisis, pasaban desde los regalos a la concesiones de cargos y remuneraciones, siempre en beneficio de quien las otorga, algo que a juicio del escritor, finaliza en la aceptación de chantajes que se envuelve dentro de el delito organizado y la aceptación oficial de la corrupción. Todas estas irregularidades dan nombre a su artículo ‘el agujero negro de la democracia’.
El diario Montanes publicaba un análisis que comenzaba con la alusión al trato de favor que la ley realiza en ocasiones. Los tratos de favor a los que hacía alusión el análisis, pasaban desde los regalos a la concesiones de cargos y remuneraciones, siempre en beneficio de quien las otorga, algo que a juicio del escritor, finaliza en la aceptación de chantajes que se envuelve dentro de el delito organizado y la aceptación oficial de la corrupción. Todas estas irregularidades dan nombre a su artículo ‘el agujero negro de la democracia’
El artículo hace un análisis social de los protagonistas de la corrupción, haciendo una amplia diferenciación entre los ‘pícnicos’, asemejándolos con la morfología de Sancho Panza, los asténicos, que encarnarían el Don Quijote del siglo XXI. Los sancho pancitas tendrían a cometer delitos de fraude, estafa y soborno, mientras que los segundos tienden a la prevaricación, el cohecho y la falsedad documental. Jesús Gil, Marisol Yagüe, Juan Guerra y Rosendo Naseiro, pertenecerían al prer grupo, mientras que Alfonso Guerra, Luis Oliveró o Alberto Flores serían más quijotescos.
La morfología humana es un factor muy tante a tener en cuenta en este análisis, según el analista, los cuerpos atléticos serían susceptibles de pecar de delitos urbanísticos y tráfico de influencias. Julián Muñoz, los alcaldes socialistas de Garrucha y Najar y los populares de Orihuela y Torrelodones pertenecerían a este tipo.
La otra tipología albergaría a José Antonio Roca y ‘el Pocero’, que reúnen las características de mostrarse fríos e introvertidos. A ellos les corresponden la apropiación indebida, el blanqueo de dinero y las adjudicaciones irregulares.
Otro categoría la denomina el escritor como ‘los ciclotímicos’, que en caso de demostrarse las presuntas irregularidades presentadas, entrarían en esta categoría Francisco Granados, Pedro Tirado, Enrique Porto y Juan Luis González Montoso, su ‘malversación de caudales públicos, delitos societarios y financiación ilegal de partidos’ .
Parada subraya todos estos delitos como los característicos del urbanismo de competencia municipal, no sólo en cuanto a la violación de las normas se refiere, sino en favorecer los intereses personales en detrento de la lealtad jurídica de la comunidad. El artículo hace un llamamiento a los políticos para que acudan desnudos a sus puestos, aunque anden vestidos de gala antes y después, que no aprovechen ‘el trance para engalanarse’.










