Milagros Pérez Oliva, Redactora Jefe del área de Salud del diario El País

Tras el lanzamiento del suplemento mensual de El País, PRSalud ha entrevistado a Milagros Pérez Oliva, máxa responsable del área de Salud del diario de Prisa. la Información, Pérez Oliva trabaja en el diario El País desde 1982 y su labor periodística se ha centrado en las especialidades de biomedicina y Salud, aunque también ha ejercido otras responsabilidades, como redactora jefe de la edición de Cataluña. Además, colabora como comentarista de la actualidad en los programas ‘Hoy Hoy’ y ‘A Vivir que son dos días’ de la Cadena Ser, y en ‘El Matí’.

A lo largo de su trayectoria profesional ha recibido diversas menciones, como el premio Bienestar Social 1996, otorgado el Ayuntamiento de Barcelona; el premio Unicef a la labor periodística a favor de la infancia; el premio de la Sociedad Española de Cardiología sobre información sanitaria; el premio CITRAN de información sobre drogodependencias, y la Encomienda de la Orden civil de sanidad. En 2006 recibió el Premio Nacional de Cultura en la modalidad de Periodismo de la Generalitat de Cataluña y el Premio Grifols de Bioética.

¿Cuáles son las razones que han llevado a El País a lanzar un suplemento de Salud?

Hace tiempo que venos observando que los temas de Salud figuran entre los más leídos. Por otra parte, cuanto más avanzada y culta es una sociedad, más tiempo dedica a los cuidados personales y de la Salud, de modo que es una demanda creciente que los medios tenemos que satisfacer. El ámbito de la biomedicina es un muy buen ejemplo del papel que jugamos los medios en la sociedad de la información. Ahora no sólo transmitos noticias, sino conociento, en el momento mismo en el que este se produce. Por otra parte, la aceleración que se está produciendo en este ámbito de la producción de conociento hace que los temas de biomedicina figuren en estos momentos entre los más atractivos. En pocos años hemos derribado barreras biológicas que parecían inmutables. Cuando a principios de los años ochenta empecé a autoespecializarme en este tipo temas, un titular como ‘una abuela da a luz a su nieta’ me hubiera parecido cienciaficción y sin embargo, lo publiqué apenas unos años después. Los avances son tan rápidos que nos cuesta incluso asilarlos. Los medios, además de informar de estas novedades, podemos ofrecer a nuestros lectores un espacio para la reflexión sobre las consecuencias que comtan, en todos los órdenes de la vida, estos avances.

Definís Salud como un suplemento mensual de biomedicina y calidad de vida. ¿Son estos dos aspectos los pilares en torno a los cuales gira la publicación? ¿Por qué?

La parte de la biomedicina es muy tante que representa aquello que es nuevo y que los lectores merecen conocer. Pero no queremos litarnos a dar las novedades biomédicas. Aplicamos un concepto de Salud muy amplio, que abarca tanto los aspectos biológicos y médicos, como sociales, psicológicos y culturales. Tratamos el bienestar, en sentido amplio, y queremos ofrecer información que sea útil para la gestión de la Salud y el bienestar, incluido el placer de aprender más sobre estos temas.

¿Crees que la periodicidad mensual es la idónea para este suplemento, si tenemos en cuenta la cantidad de información que genera diariamente el sector Salud?

De momento hemos planteado una publicación mensual razones de encaje en la política general de suplementos del diario. Es una periodicidad que plica ciertas dificultades en la gestión de las noticias más novedosas. La comunicación inmediata de las novedades es una función que ya hacemos diariamente desde la sección de sociedad y desde las páginas de Salud de los martes. El suplemento es una oferta más reposada y con más elementos de reflexión, siempre a partir de la actualidad.

¿A qué público va dirigido Salud?

Responder a esta pregunta es el principal reto de todos los suplementos especializados que se publican dentro de un diario de información general. La cuestión es si te diriges preferentemente a los profesionales del sector o a los lectores en general. Por un lado, hay un segmento de la población que es la directamente plicada en los temas de biomedicina, que obviamente es la prera destinataria de la información, estar profesionalmente concernida. Pero no queremos quedarnos sólo en los profesionales, que la Salud es una cuestión que afecta y preocupa a todas las personas. En este caso, el problema que se plantea es cómo tratar y presentar las informaciones de forma que interesen y sobre todo no defrauden las expectativas del segmento de lectores más informado y pueda ser útil y atractivo también para los que no son especialistas, es decir, cualquier lector. Ahí radica precisamente la dificultad y el atractivo de nuestro trabajo. Ese es nuestro reto.

¿Qué acogida han tenido estos dos preros números del suplemento entre los lectores y cuáles son vuestras expectativas para números sucesivos?

La acogida ha sido excelente. Hemos recibido muchísos correos. En general, los medios sanitarios echan de menos disponer de espacios para la divulgación y la reflexión. El valor añadido que intentamos atar a lo mucho que ya se hace la divulgación médica es una mirada crítica desde la madurez y la responsabilidad.

¿Crees que el campo de la salud es un tema de creciente interés entre la población?

Como ya he comentado antes, es un indicador de desarrollo. Cuando más alta es la renta, mayor interés los aspectos del bienestar y también mayor demanda y mayor consumo de productos y servicios sanitarios. Estoy muy convencida del tante papel que la información sobre salud ejerce en la sociedad moderna. La información no sólo ayuda a la gente a gestionar mejor su Salud, a prevenir enfermedades, sino que es también un factor de equidad: la gente mejor informada cuida mejor su Salud y puede hacer mejor uso de los servicios sanitarios, a condición de que le procionemos una información ajustada y de calidad. Dar una información rigurosa no es fácil. El problema que tenemos ahora es justamente el exceso de información; de información a veces poco fiable, que genera falsas expectativas y consumo innecesario.

¿Qué cambios se han dado en los últos años para que a la sociedad le empiece a interesar cada vez más la Salud? Antes la gente sólo iba al médico cuando estaba enfermo, pero eso ha cambiado…

Vivos en una cultura cada vez más hedonista en la que se están desterrando los elementos de conformismo que habían instaurado las religiones. Es una cultura que cada vez tiene menos tolerancia al sufriento y a la enfermedad. Queremos vivir muchos años y no sufrir. Antes la Salud era una cosa de Dios. Dios te daba buena o mala Salud. Ahora predomina la idea de que la buena o mala Salud no es sólo una cuestión de azar. Interviene la genética, pero también, y mucho, el medio ambiente y la cultura, los propios comtamientos. Pero al mismo tiempo, algunos de los factores que intervienen sobre la Salud, ejemplo la alentación, han sufrido transformaciones extraordinarias. Por prera vez, una parte tante de la humanidad vive en condiciones de excedencia alentaria. Comemos mucho más de lo que necesitamos y gastamos. Y esos elementos que intervienen en la Salud están con frecuencia condicionados las reglas del mercado. Hay una enorme presión publicitaria orientada a condicionar aspectos de la vida que influyen en la Salud. Hasta el punto de que una de las críticas que se hace a nuestra cultura es precisamente la de la excesiva medicalización de la vida. Estamos tratando como enfermedad cosas que nunca lo han sido, como la menopausia o la tristeza que nos provocan las contrariedades de la vida.

¿Se trata la información sobre Salud de una manera especial al resto de secciones? (es información que influye directamente en el lector/paciente…)

La información de Salud ha de cumplir exactamente los mismos requisitos que las de cualquier otra sección. En este caso, tal vez se ha de extremar el cuidado en el tratamiento de los temas, que afectan a materias muy sensibles para los lectores.

¿La información sobre Salud tiene en España el rigor que cabría esperar?

En los últos años la información sobre Salud ha mejorado de forma extraordinaria, principalmente dos factores: la creciente especialización de los periodistas que la cubren y la labor de los gabinetes de comunicación, que facilitan información contrastada y técnicamente solvente a los muchos medios que carecen de periodistas especializados.

¿Queda todavía mucho avanzar en este campo?

Por supuesto. Hemos mejorado, pero todavía debemos hacerlo más. Ahora el reto es precisamente eludir los sesgos ocultos que muchas veces llegan con la información. Ahora ya no tenemos que ir a buscar la información. Nos viene, y nos viene en tal cantidad que podríamos llenar cada día dos periódicos solo con noticias relacionadas con la Salud. Pero mucha de esa información está sesgada y el trabajo más difícil ahora es precisamente aquilatar bien la tancia de cada noticia y contrastarla con fuentes realmente solventes e independientes.

Para vuestro suplemento contáis con la colaboración de numerosos expertos, ¿Os vais a rodear en los sucesivos números del mismo equipo de colaboradores o éstos irán cambiando en función de los temas a tratar?

Cuento con un equipo muy experentado que hace años que colabora con El País y algunas nuevas incoraciones con las que me siento muy a gusto. Sobre esta base, queremos ampliar lo máxo posible la participación en el suplemento.

Y al hilo de lo anterior, ¿cómo transmiten los profesionales sanitarios la información sobre salud? ¿es necesaria la intermediación del periodista para que ejerza la labor divulgativa o el médico comunica de manera efectiva si mismo?

Yo no me planteo la dicotomía médicoperiodista. El periodista es el que tiene la responsabilidad de lo que se emite. Y en los textos que escribe, si el periodista es riguroso, trabaja a fondo y tiene buenas fuentes, los contenidos pueden ser tan buenos como los que pueda procionar un médico. Pero también hay médicos que escriben muy bien y hacen divulgación científica de forma muy atractiva. No son incompatibles. La cuestión es hacerlo bien. Yo he incorado secciones en las que los médicos explican en prera persona sus experiencias y reflexiones.

Hemos echado en falta en vuestro suplemento la típica sección de cartas de los lectores, ¿ qué se ha prescindido de esta sección que goza de tanta popularidad?

En el prer número no aparecieron cartas que era el prero. Pero en el segundo ya aparecen. Y en general queremos fomentar la participación de los lectores. Pero el papel es un sote muy litado para esta participación. Nuestro propósito es hacer un desarrollo mucho más extenso en el sote digital.

Para terminar ¿qué temas crees que van a marcar la agenda sanitaria en los próxos tiempos?

En el ámbito biomédico, los avances en medicina embrionaria (células madre, clonación, etc.) y el desarrollo de las ciencias neurológicas. Justo ahora estamos comenzando a penetrar en el cerebro y la actividad neuronal. Creo que en algunas dolencias estamos apunto de dar saltos cualitativos que generarán una gran actividad informativa, particularmente en el ámbito del cáncer con la descripción de los mecanismos de las metástasis, y el desarrollo de la genómica y la proteómica. Pero los aspectos sociales van a darnos también mucho trabajo: la epidemia de obesidad infantil que tenemos es un indicador de que hay un nivel de patología social muy elevado que tendrás sus consecuencias.

Para finalizar ¿qué noticia sobre el ámbito de la Salud te gustaría publicar?

Pues permíteme que aquí mezcle mi trabajo con mi vida. Se ha avanzado mucho en la curación del cáncer y de hecho se curan más de la mitad de los que se diagnostican, pero todavía sigue muriendo muchísa gente. Y la inmensa mayoría de los que mueren lo hacen, no el tumor prario, sino las metástasis, su extensión a otros órganos del cuerpo. Yo he sufrido un cáncer y me encantaría poder publicar una noticia con este titular: ‘Hallada una molécula que bloquea la migración de células cancerígenas a otros órganos’. Espero poder llegar a publicarla.