En la Tierra a sábado, noviembre 23, 2024

Tadeu Alves, presidente MSD Latinoamérica

Por su interés publicamos íntegramente una noticia relacionada con la quiebra de la patente del antirretroviral en Brasil el presidente Lula da Silva.

‘Estoy decepcionado’: presidente de Merck

Bogotá/Laura Duperret/[email protected]

Brasil es el prer país latinoamericano que decide otorgar una licencia obligatoria a un medicamento, o como se le conoce comúnmente, romper su patente para que sea copiada los laboratorios genéricos. Sólo Mozambique, Malasia, Indonesia y Tailandia han tomado esta medida.
El presidente Luiz Inácio Lula da Silva firmó el vies 4 de mayo la licencia obligatoria de Efavirenz, antirretroviral utilizado en los tratamientos contra el Sida, producido la farmacéutica estadounidense Merck Sharp & Dohme.

Lula justificó esta decisión argumentando que el costo del medicamento de Merck era demasiado alto, lo cual amenazaba la viabilidad del programa nacional que Brasil desarrolla para combatir la enfermedad.

En diálogo exclusivo con LA REPÚBLICA desde Sao Paulo, el presidente de Merck en Latinoamérica, Tadeu Alves, dijo que estaba decepcionado la decisión de Lula, pero aclaró que “el gobierno tiene el derecho legal de proceder de esta manera siempre y cuando el país sufra alguna clase de emergencia nacional”.

Desde 1999, el laboratorio farmacéutico ha trabajado conjuntamente con el gobierno brasileño contra el Sida, apoyando el programa nacional que se desarrolla en este país. Para este fin, según Alves, han bajado el precio del antirretroviral 77 ciento.

Lula argumenta su decisión en que el precio de Efavirenz es más bajo en Tailandia (0,65 centavos de dólar) que en su país, donde se vendía a 1,57 centavos de dólar. Alves define que la mejor manera de asegurar un acceso equitativo al medicamento es “colocar precios de acuerdo al nivel de evolución de cada mercado, el cual se mide con el Índice de Desarrollo Humano del Programa de desarrollo de las Naciones Unidas, y el nivel de penetración de la enfermedad (medición que hace el Programa Conjunto de la ONU del predominio del virus en adultos)”.

Brasil tiene 0,5 ciento de predominio de VIH en adultos, mientras Tailandia cuenta con un nivel de penetración mayor al uno ciento.

Consecuencias
Quebrar una patente afecta directamente a las compañías de Investigación y Desarrollo, ya que “reduce los incentivos que brinda la protección de la Propiedad Intelectual a los laboratorios de invertir los altos costos necesarios para producir un medicamento”, dijo Alves.

El presidente ejecutivo de la Asociación de Laboratorios Farmacéuticos de Investigación en Colombia (Afidro), Francisco de Paula Gómez, asegura que la protección a la Propiedad Intelectual es la única herramienta que garantiza el desarrollo de nuevos productos. Para el dirigente, una licencia obligatoria “plica para el laboratorio poseedor de la patente la posibilidad de invertir y es un desestímulo a la investigación futura”.

Otra consecuencia de la medida de Lula para el mercado es que desincentiva la inversión extranjera, “lo cual repercute en la productividad y en el índice de empleo en el país tador”, dijo el superintendente delegado para la propiedad industrial de la Superintendencia de Industria y Comercio en Colombia (SIC), Gian Carlo Marcenaro.

Una de las soluciones posibles dadas Marcenaro, es que Brasil hubiera procedido a tar el medicamento de Tailandia, país donde se vende Efavirenz a un costo más bajo, para así no quebrar la patente y afectar la confianza de los inversionistas y las empresas multinacionales.

Sin embargo, el embajador de Brasil en Colombia, Júlio César Gomes dos Santos, justifica la decisión del presidente brasileño, argumentando que esta se basa en las reglas internacionalmente reconocidas y “se trata de una escogencia entre el respeto al la Propiedad Intelectual, aspecto netamente económico, y el derecho a la vida, el cual evidentemente debe prevalecer”, dijo.

El diplomático le compartió a este medio que el gobierno de Brasil invertía cerca de 580 dólares anuales paciente, pero adquiriendo el medicamento de otros laboratorios aprobados la Organización Mundial de la Salud (OMS), varían entre 163 y 166 dólares.

Acuerdo
Adpic
Durante la Ronda de Uruguay de la OMC (19861994) se llegó al acuerdo de los Adpic que busca el equilibrio adecuado entre las necesidades de los pacientes para el acceso a los medicamentos y la innovación científica. El acuerdo establece que los países miembros pueden autorizar una licencia obligatoria con fines no comerciales, es decir, que sea el gobierno quien distribuya los medicamentos. El convenio de la OMC no aclara bajo qué circunstancias un presidente puede tomar esta decisión, pero se relacionan con el hecho que la salud del país sea vulnerada una epidemia o emergencia de salud, es decir, con una excepcionalidad. Se puede concluir que Brasil no cumplió con ninguna de las condiciones postuladas el acuerdo, ya que no hace parte de la lista de países menos adelantados, puesto que tiene una economía sólida, la duodéca en el mundo, y no presenta ninguna situación excepcional de salud o de emergencia sanitaria.

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