Más tiempos, mejores medios. Si médicos y Pacientes disponen de algo más de tiempo para su conversación y además lo hacen en un entorno apropiado, posiblemente la relación mejoraría bastante. Esta es la principal conclusión a la que llegaron las casi 150 personas reunidas ayer en Sevilla en el curso del III Diálogo Médico Paciente, convocados la Coalición de Ciudadanos con Enfermedades Crónicas y la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria, con el apoyo de la Junta de Andalucía.
Más tiempos, mejores medios. Es una fórmula tan sencilla que parece obvia. Si médicos y pacientes disponen de algo más de tiempo para su conversación y lo hacen en un entorno apropiado, posiblemente la relación mejoraría bastante. Pero lo obvio está reñido a veces con la realidad, sobre todo si escasean los recursos o
Foto izquierda: De izquierda a derecha, Ángeles Prieto Rodríguez, Docente de
Foto derecha: De izquierda a derecha, Vicepresidente de semFYC, Jose Antonio Prados, Ilmo. Sr. Secretario General de Calidad y Modernización, D. José Luis Rocha Castilla y el Presidente de
‘Me niego a usar un pasillo del hospital para decirle a la esposa de un paciente mío de 42 años con cáncer de próstata que no llegará a dos navidades’, afirmaba elocuente Alfredo Michan Doña, para ilustrar trágicas situaciones que a veces se dan mala organización de los medios y que serían cómicas si no se tratase de la vida de seres cercanos. ‘Nos falta tiempo, y el tiempo es clave para poder escuchar bien a los pacientes’, aseguró Michan Doña. El experto del Hospital Jerez de la Frontera también recordó a Gregorio Marañón al decir que la mejor tecnología que posee el médico es la silla y la mesa, para escuchar.
Rosario Fernández, de FEDER, habló de las singularidades de las enfermedades raras y de los problemas que sufren quienes las padecen. Según explicó Fernández, existen unas 7.000 enfermedades consideradas raras, y entre el 6 y el 8% de la población las sufre. La mayor parte de ellas son crónicas, poco investigadas y requieren una atención multidisciplinar. La representante de FEDER relató el peregrinaje angustioso de estos enfermos, de médico en médico y de hospital en hospital a la búsqueda de un diagnostico. ‘En muchos casos se produce una derivación abusiva a las consultas de psiquiatría, lo que a veces puede complicar bastante
‘Para los pacientes es muy especial sentir que el profesional les sonría, les dé mensajes positivos, les haga sentir únicos, les llame su nombre, los salude con un beso y se preocupe sus familiares. Por eso los profesionales sanitarios del siglo XXI tienen que ser competentes no sólo técnicamente, sino también relacionalmente. Porque las emociones están muy interconectadas con la evolución de las enfermedades. Los profesionales tenemos entonces que aprender a ponernos en el lugar de los pacientes, y que éstos se sientan escuchados. La clave está en escuchar mucho y hablar poco, y que lo que digamos lo hagamos de forma breve, que el exceso de información dificulta la comunicación’, concluyó Ángeles Prieto Rodríguez.
Por últo, José Luis Rocha Castilla, de la Consejería de Sanidad de la Junta de Andalucía, habló de la complejidad de la relación entre médico y paciente en el ámbito hospitalario. ‘En los hospitales, la atención al paciente se presta con multitud de profesionales, lo que deberíamos hablar mejor de una relación equipo sanitariopaciente, que en algunos casos puede llegar a ser confusa. Por eso se hace necesario que el paciente tenga como referente a una sola persona dentro del equipo sanitario, es decir a un médico que sea responsable de todo su proceso asistencial’.
Tras estas exposiciones tuvo lugar un debate que contó con la participación activa de numerosos asistentes, entre ellos miembros de diferentes asociaciones de pacientes y distintos agentes de










