Los actores se suman al sector y rechazan la normativa, y exigen el reconociento explícito de la contribución de los actores a la creación de una película.
La mayoría de las salas de cine de España cierran hoy sus puertas como protesta la recientemente aprobada en el Congreso Ley del Cine. La clausura ha sido convocada la Federación de Cines de España, FECE. PRNoticias intentó, sin éxito, entrevistar a los convocantes, quienes demoraban responder a nuestras preguntas. El sector prepara una campaña de información pública que transmita su posición, y una serie de reuniones con los partidos políticos en un nuevo intento trasladarles sus históricas demandas. Por su parte los actores de cine también muestran su oposición.
Un llamamiento a los partidos políticos que demuestre que los exhibidores son uno de los pilares de la industria cinematográfica, afirman, y que ejemplifique cómo les perjudicará la aplicación de la nueva legislación. Una legislación que, cual Ley del Vino de Salgado, ha sembrado una gran polémica prero con las televisiones privadas y más tarde con los exhibidores y distribuidores.
Según FECE, el Gobierno desencadenará con la Ley una grave crisis económica. Crisis ya existente, pero que hasta ahora se ha sustentado con la fuerza inversora de estos empresarios comprometidos. La normativa, según FECE, ha hecho caso omiso a las peticiones de los plicados, sembrando incluso discordia entre exhibidores y distribuidores, como la regulación de los abusos de las majors americanas, denunciadas en innumerables ocasiones el Servicio de Defensa de la Competencia (SDC).
Tampoco valora la Ley la retirada de la cuota de pantalla. Muy al contrario, la ministra Carmen Calvo, ha decidido mantener la denominada cuota de pantalla (exhibición de una película de cine español o comunitario cada 3 procedentes de otros países), lo que el sector tilda de intervencionista, pues obliga a proyectar películas que la gente no quiere ver, y destaca que no se da en ningún país de nuestro entorno. Una medida en teoría, creada para favorecer a nuestro cine frente a Hollywood. Sin embargo, se permite que la industria americana abuse de su posición sobre los exhibidores españoles. Mientras, Calvo afirma que esta medida, existe en los ordenamientos europeos, y es vital para proteger nuestro cine.
Los actores se suman al sector y rechazan la normativa, y exigen el reconociento explícito de la contribución de los actores a la creación de una película. Un sector que se siente agredido el Gobierno, colectivo junto al que se posicionó en la anterior legislatura para protestar contra la Guerra de Irak. Posiblemente una gran fuerza que el Ejecutivo ha descuidado. La vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, ha trasladado a las principales organizaciones representativas de actores la voluntad del Ejecutivo de escuchar las quejas que han planteado al proyecto de Ley del Cine. Quejas que los afectados esta ley plasmarán en un manifiesto especial.
Por su parte, el PP aseguró que presentará enmiendas al proyecto de Ley de Cine encaminadas a que los exhibidores reciban ‘las contraprestaciones que merecen a cambio del manteniento de la cuota de pantalla, que ahora no sería otuno derogar’. Lo cual no tranquiliza precisamente al sector. Sin embargo, el PP esta que una buena contraprestación que ayudaría a los afectados, son beneficios fiscales para los exhibidores así como la valoración de las demandas en relación a las majors.
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