¿Qué aspecto tiene una persona que padece Fibromialgia?

Fibromialgia. Cada vez son más los reumatólogos de todo el mundo que empiezan a diagnosticar esta patología aunque, según los expertos, se trata más de un síndrome que de una enfermedad y es que, al dolor de las diversas zonas del cuerpo, la Fibromialgia (FM), hay que sumar unos síntomas añadidos que hacen muy difícil su diagnóstico; se suelen reproducir uno a uno, o varios a la vez, no tienen elementos en común, y aparecen en diferentes zonas del cuerpo: síndrome de piernas inquietas, cefaleas, intestino irritable, desórdenes del sueño, depresiones, menstruaciones dolorosas  y rigidez, entre otros.

Las personas que sufren FM tienen síntomas muy parecidos a la Artritis Reumatoide (AR) lo que hace más difícil si cabe su identificación y posterior tratamiento, pero en realidad no son lo mismo. Lo que realmente las diferencia es que la AR es una inflamación de las articulaciones mientras que la Fibromialgia es una forma de reumatismo que no causa inflamación, aunque sí dolor.

Aunque se considera un síndrome nuevo, empezó a mentarse en el siglo XVIII como dolores constantes. Sin embargo, no fue hasta el pasado siglo cuando se empezó a tener conciencia real de que existe y de que los dolores que sienten los Pacientes, además de sus síntomas asociados, no son aginarios.

Uno de los principales problemas que tiene esta enfermedad es que, hasta que se da con ella, el paso hospitales, pruebas diagnósticas, medicamentos subvencionados etc… hace que el gasto sanitario y farmacéutico aumente considerablemente, además de, supuesto, lo que ello supone para los Pacientes a nivel físico y psicológico. Una vez descubierto, comienza el tratamiento y, pardójicamente, según el Doctor Jordi Carbonell, Jefe del Servicio de Reumatología del Hospital del Mar de Barcelona ‘los gastos se reducen’. Para el Doctor Carbonell, ‘la FM puede mostrarse junto con otra enfermedad de diversa etiología, como puede ser la AR, el Lupus u otras enfermedades que no tengan que ser autoinmunnes necesariamente’.

Según el Doctor Est Choy, Director de la Unidad de Ensayos Clínicos del Sir Alfred Garrod en el Departamento de Reumatología del King’s College, ‘es muy tante establecer el diagnóstico de una manera precoz ya que se reducirían los gastos en los sistemas sanitarios y para eso es posible determinar el tratamiento sabiendo qué áreas son susceptibles al dolor a través de un escáner que marca las zonas doloridas en tiempo real’.

Asismo, la Doctora Lesley Arnold, Directora de Investigación de la Salud de la Mujer, considera que ‘el dolor se puede controlar con diversos medicamentos’, desde los típicos AINE’s y analgésicos, hasta los actuales IRSS (duloxetina, milnacipran), Alpha 2 Delta (Garbapentina y pregabalina) que reducen la llegada del calcio a la neurona. Aunque, ahora, no existen medicamentos contra la Fibromialgia aprobados la FDA y la EMEA, Arnold aseguró que para un tratamiento efectivo han de realizarse ejercicio y terapias conductuales como métodos coadyuvantes para sobrellevar el dolor.

Es tante saber diagnosticar la enfermedad a tiempo para aumentar la calidad de vida de los Pacientes ya que, a mayor tiempo, ésta se ve reducida con consecuencias graves tanto para el sistema sanitario como para los Pacientes, que han de convivir con la enfermedad. Hay que recordar que puede desarrollarse de forma paralela a otras que pueden terminar ocultándola.

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