Hacia Europa podría estar mirando Mutua Madrileña, cuya expansión trascenderá las fronteras españolas. Así lo ha confirmado hoy el presidente de la compañía, José María Ramírez Pomatta, que ha presidido la Junta General de Mutualistas. El encuentro fue bastante movidito, sobre todo en la etapa de preguntas, donde algunos planteamientos anaron el encuentro. Entre las intervenciones: el cuestionamiento a que la convocatoria se publicara en El Economista y la petición de dividendos. Las respuestas no tienen desperdicio.
Tras destacar en líneas generales el desempeño económico y la acción social de Mutua a lo largo de 2006, Ramírez Pomatta señaló los derroteros los que se desarrollará el negocio de la compañía: expansión internacional e pulso a la construcción de la Ciudad Socio Sanitaria, que pretende ser un centro pionero en materia de salud, docencia e investigación y cuyo objetivo es estar en funcionamiento en 2010.
Pero sin duda lo que más ‘vidilla’ le dio a la Junta fue la tanda de preguntas. En la prera intervención se pidió explicaciones la decisión de difundir la convocatoria a través del periódico El Economista. Y es que el mutualista en cuestión, que manifestó todos sus respetos dicha cabecera, destacó que no se trata de un medio de comunicación que tenga la máxa difusión. El presidente de Mutua explicó que se trata de un periódico en el que gran número de empresas madrileñas se anuncian, pero no descartó reconsiderar esta decisión de cara al próxo año.
Ramírez Pomatta llamó a los mutualistas a no generar temor o malas interpretaciones a través de sus preguntas. ‘Hay que estar bien informado’, recomendó el máxo directivo de la compañía, que aclaró las dudas de uno de sus interlocutores sobre la situación del levantamiento de la Torre de Cristal en los antiguos terrenos de la Ciudad Detiva del Real Madrid. El presidente de la entidad aseguró que de los 12 procedientos jurídicos que se presentaron en su momento ninguno ha sido estado y todos tienen sentencia firme. Y aclaró que ninguno de ellos estaba dirigido a Mutua, lo que la Aseguradora no podría verse perjudicada.
Pero uno de los momentos álgidos del encuentro fue cuando Ramírez Pomatta respondió tajante a la petición de uno de los mutualistas que segundo año consecutivo pedía dividendos a la compañía. Según sus cálculos, cada mutualista debería recibir cerca de 100 euros el desempeño de la entidad, a lo que el presidente explicó que sólo en caso de que Mutua fuera una sociedad con cuotas participativas, entonces se podría barajar esa opción, pero la descartó de plano en las circunstancias actuales. ‘Si usted no ha venido aquí a preocuparse Mutua, sino a ganar dinero, pues dése de alta con Mapfre’.
‘Lo mejor está llegar’, dijo Pomatta, que calificó la compra de Autoclub Repsol, que cuenta con 2.000 grúas en toda España, como una ‘operación redonda’ que dará muchas satisfacciones en el futuro. Y si bien no respondió durante la Junta hacia dónde se dirigirán las inversiones en el extranjero de su compañía, sí adelantó a la prensa que los tiros van Europa, aunque sin apuntar en qué dirección. Si bien la brújula de Mutua no apunta claramente a un país, éste debe dar las garantías suficientes para mantener los niveles de rentabilidad y solvencia de la entidad. De momento, la premisa en este tema sigue siendo la discreción.
Seguiremos Informando…
