ASUNCIÓN (17/07/07) La reaparición del periodista Enrique Galeano, quien llevaba en paradero desconocido desde una año y cinco meses, secuestrado presuntamente una mafia de Yby Yaú y escondido amenazas en Sao Paulo, Brasil, no se ha librado de la polémica. Nicanor Duarte de Frutos, acusa el comunicador de ‘irresponsable’.
ASUNCIÓN (17/07/07) La reaparición del periodista Enrique Galeano, quien llevaba en paradero desconocido desde una año y cinco meses, secuestrado presuntamente una mafia de Yby Yaú y escondido amenazas en Sao Paulo, Brasil, no se ha librado de la polémica. El presidente de la República, Nicanor Duarte de Frutos, acusa el comunicador de ‘irresponsable’ y señala que todo fue una ‘farsa’ que perseguía perjudicar al Gobierno.
El mandatario Nicanor Duarte, a diferencia del resto de diputados, periodistas y buena parte de la sociedad, no ha acogido con tanto júbilo el encuentro del comunicador Enrique Galeano, quien llevaba en paradero desconocido durante un año y medio. Para el presidente, el informador fue un ‘irresponsable’ haber desaparecido más de un año y siete meses, causando un grave daño moral al Gobierno, que fue sindicado como principal promotor de un presunto terrorismo de Estado, señala La Nación.
Y es que para el presidente de la República, la actitud torcida y mentirosa asumida mucho tiempo políticos inescrupulosos, periodistas sin principios, sindicatos sesgados, han causado un ‘tremendo daño a la agen’, a la ‘credibilidad’ del Gobierno. Así como afirma que las versiones y los datos fidedignos que siempre han tenido y ha entregado al país daba cuenta de la personalidad ‘bastante complicada’, ‘contradictoria’, del ‘personaje’ Enrique Galeano.
Como ya señalábamos en PRLatam, el periodista Enrique Galeano reapareció en Sao Paulo, Brasil, donde permanecía escondido presuntas amenazas. Reteros sin Fronteras, que ha seguido su caso, relata la historia de su secuestro señalando que en las preras horas de la tarde del 4 de febrero de 2006 el periodista, que trabajaba en Azotey, llamó a su mujer al domicilio de Yby Yaú, a 35 kilómetros de allí, para decirle que regresaría antes de la caída de la noche. En la carretera, dos individuos que circulaban en un automóvil blanco le obligaron a pararse, y le secuestraron. Los agresores hablaban tugués, lo que llevó a Enrique Galeano a pensar que se trataba de dos secuaces de ‘Cabeza Branca’ (Cabeza Blanca), una organización mafiosa brasileña que actúa en la frontera entre ambos países. En ese mismo momento la amenazaron con matar a su hijo Pedro.
Golpeado y quemado con cigarrillos, al periodista le llevaron a San Juan Caballero (Noreste). Los secuestradores le obligaron a mostrarse las calles de la ciudad y posteriormente a instalarse en el hotel Dina Tony, con una prostituta. En la noche del 5 de febrero dejaron en libertad al periodista en Campo Grande (Brasil), con la siguiente advertencia: ¡Si volvés a Paraguay, estás muerto!, relata RSF.
Temiendo la vida de sus hijos, Enrique Galeano se plegó a la consigna y prefirió no contactar con sus familiares.
La organización afirma que poco antes de desaparecer Enrique Galeano había cubierto, para su emisora, el embargo de un cargamento de armas y cocaína en presencia del comisario de distrito Osvaldo Núñez, y del diputado del Partido Colorado (en el poder) Magdaleno Silva. Ambos son sospechosos de connivencia con el jefe de la Cabeza Branca, Luiz Carlos da Rocha. A ninguno de los tres se les ha interrogado en el marco de la investigación. Ante el anuncio de la reaparición de Enrique Galeano, Magdaleno Silva ha prometido denunciar ante la justicia al Sindicato de periodistas de Paraguay (SPP), haberle plicado en la desaparición del periodista.
El CPJ señala que el retero radial se trasladó a Uruguay este fin de semana y ha pedido refugio. Como medida de precaución, su esposa y cuatro hijos también fueron a trasladados a una casa de refugio manejada la Iglesia Católica en Asunción.
Sin embargo, el presidente de Paraguay no parece aceptar esta versión o no quiere creerla ya que denuncia también ante la comunidad internacional toda ‘esta farsa montada contra el Estado’, contra el Gobierno, que, según el mandatario, no es posible que nadie de los propiciadores de marchas y gritos desaforados en las calles no tuvieran conociento de que Galeano estaba ‘campantemente’ en Brasil, advirtiendo que cree que a partir de este momento la palabra de este comunicador ‘no debe ser tenida en cuenta’ debido a que no tuvo la ‘responsabilidad mína’, el ‘sentido común’ de llamar a la familia para decirle que estaba con vida cuando la esposa suplicaba el regreso, lo que afirma que es una persona que ‘no merece ninguna confianza’, y que debe ser ‘objeto de algún análisis, mucho más serio’.
Por otro lado, y en el mismo diario antes mencionado, se alude a que la fiscalia Camila Rojas contradice la versión de Kike Galeano. Según la fiscalia, es falso que el periodista le haya procionado dato alguno acerca del paradero y el encuentro con el narcotraficante buscado Luis Carlos da Rocha, más conocido como ‘Cabeza Branca’ en Concepción. En la 970 AM, la representante del Ministerio Público confirmó que Galeano nunca reveló dato alguno sobre el encuentro que supuestamente tuvo con el buscado narcotraficante a pesar de que éste afirmase que había pasado la información a la agente fiscal y al entonces director de la Dirección de Operaciones Antidrogas, muestra La Nación.
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