Los pacientes con Apnea del sueño tienen entre 7 y 10 veces más riesgo de sufrir un accidente de tráfico que la población general. Según Antoni Riu, subdirector general de Formación Vial de
La apnea del sueño es una enfermedad que causa obstrucciones en la garganta mientras se duerme, provocando somnolencia diurna, con el consiguiente riesgo de sufrir accidentes de tráfico y laborales. Esta enfermedad afecta sobre todo a los hombres de
Según un estudio de las aseguradoras alemanas, este comtamiento automático de quedarse dormidos ejemplo, frente al volante de un coche, causa el 24% de los accidentes mortales en autopista, y en España, se calcula que 600.000 españoles conducen con somnolencia crónica, en muchos casos sin saber siquiera que padecen este peligroso trastorno. Pero lo que resulta más preocupante que los que son casos graves, son los leves, ya que al no saber que la tienen, no toman medidas. Los fabricantes de coches aseguran que en España se podrían salvar unas 150.000 vidas cada año si se pusiera remedio a este trastorno.
Una de las soluciones que los fabricantes de automóviles plantean, es la de hacer vibrar el asiento si el vehículo se sale del carril el que circula, permitiendo al conductor reaccionar ante la posible salida de vía. Este sistema detecta en la carretera (a partir de
Los modelos más altos de BMW, tienen avisadores para los conductores que sufren somnolencia. El sistema, a través de la frecuencia y velocidad del parpadeo del conductor y de la apertura de sus párpados, reconoce el grado de atención o de cansancio. Cuanto mayor sea el cansancio, más frecuente y lento será el parpadeo. Al mismo tiempo, los ojos se van cerrando gradualmente. El sistema deduce el grado real de atención o cansancio del conductor a partir de esos datos.
La firma BMW diferencia cuatro fases de atención o cansancio:
• 1ª fase de vigilia
• 2ª fase de reducción de la atención
• 3ª fase de cansancio
• 4ª fase de estado de so. Los conductores que alcanzan este últo estado corren el riesgo de quedarse completamente dormidos.
La falta de atención, la fatiga y la somnolencia pueden contribuir a muchos accidentes de tráfico. Los expertos han demostrado que las personas que padecen este tipo de trastornos, no conducen demasiado bien, ya que sus tiempos de reacción son muy bajos. Por tanto, esta falta de concentración puede afectar gravemente a la capacidad de conducir de forma segura.
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