La empresa cervecera Damm convocó el pasado 9 de julio el Referéndum Saaz. 5.000 barceloneses con derecho a voto se acercaron a los bares electorales (bares con urnas y votos) con el objetivo de pronunciarse a favor o en contra de la nueva cerveza Saaz.
La empresa cervecera Damm convocó el pasado 9 de julio el Referéndum Saaz. 5.000 barceloneses con derecho a voto se acercaron a los bares electorales (bares con urnas y votos) con el objetivo de pronunciarse a favor o en contra de la nueva cerveza Saaz.
Se trata de una original campaña de publicidad creada para el lanzamiento de Saaz, definida como ‘la cerveza para quienes no les gusta la cerveza’, ya que sólo tiene 3,5º de alcohol y apenas amargor.
La campaña se inspiró en la estética de la segunda República, el cartelismo y los discursos de la época para invitar a los barceloneses a votar en este sufragio tan particular. Incluso un personaje que se autoproclamaba tavoz del Referéndum, recorrió los bares de la ciudad condal haciendo campaña el sí a la cerveza.
El Referéndum finalizó, el pasado vies, en una espectacular fiesta celebrada en un marco tan incomparable como el Pati de les Dones del CCCB. El evento contó con numerosas actuaciones de circo, performances, música y videoproyecciones.
La fiesta comenzó después de realizar las últas votaciones y el recuento de votos, momento en que se comunicaron los resultados oficiales del Referéndum Saaz. Los 5.000 votantes decidieron amplia mayoría (81% Sí, 16% No y 3% de abstención) que la cerveza sí debía existir. Así, después de treinta años de las preras elecciones democráticas, la Democracia ha servido también para permitir que exista Saaz, la prera cerveza elegida democráticamente.










